DE POLÍTICA Y COSAS PEORES / Plan para el año

AutorCatón

¡Feliz Año Nuevo! Con esa manida frase les doy a mis cuatro lectores un abrazo inédito, y les deseo que sus propósitos se cumplan. ¿Qué espero yo del 2016? Espero antes que nada el don de la vida. Me propongo vivirla bien para merecerla más. Le pido a Diosito bueno que me conserve la salud, precioso bien que me permite andar todavía del tingo al tango, como dicen. Quiero tener amor: recibirlo y -más importante aún- saber darlo. Aspiro a esa felicidad tranquila que no se manifiesta en una permanente y extática sensación de absoluto bienestar, sino en gratos momentos de sosegada dicha en la tibieza del hogar, en el íntimo coloquio sostenido con uno mismo, en la charla de los amigos, en los pequeños gozos que ofrece la vida cotidiana -el café de la mañana, la sensación del trabajo bien cumplido, la comida que se disfruta, el anhelado viaje, el encuentro con amigos y familiares, el rato ante la tele, el descanso después de la jornada-; en fin, todas esas cotidianas maravillas que la costumbre nos hace no advertir. Espero seguir disfrutando la naturaleza, pues creo que en ella está Él, o por lo menos su tarjeta de presentación. Me gustaría aprender a oír más -sé que no me lo agradecerá ninguno-, y aprender a hablar menos (sé que todos me lo agradecerán). Me gustaría ser puntual, aunque no haya nadie ahí para apreciar mi puntualidad. No hablaré mal del prójimo, ni me molestaré cuando el prójimo no hable bien de mí. Quiero ser parte de la alegría de los demás, y no de su tristeza; llevar conmigo paz, y no discordias. La vida está hecha por igual de risa y llanto: espero reír un poco más y moquear un poco menos. Finalmente, como escritor, mi propósito de Año Nuevo consiste en usar menos adjetivos. Así mis textos saldrán más tersos, pulidos, claros, fluidos, llanos, limpios, transparentes, naturales, fáciles, depurados, inteligibles y sencillos. Tales son mis propósitos de Año Nuevo. ¿Los cumpliré? Quién sabe. Algunos de los que acabo de escribir ya se me olvidaron... Una mujer de estatura procerosa se presentó ante el juez y se quejó de haber sido víctima de abuso sexual, con pérdida total de la virtud. Acusó del delito a un...

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