De política y cosas peores / Inteligente y razonable

Era una extremada feminista: cuando hacía el amor con un hombre y llegaba al orgasmo gritaba su propio nombre... Himenia Camafría, madura señorita soltera, recibió una llamada telefónica obscena. Jadeando en la bocina el hombre que llamaba le dijo que le iba a arrancar la ropa y le iba a hacer esto, aquello y lo de más allá. Al término de la llamada la señorita Himenia le pidió al individuo: "Por favor, llámeme otra vez mañana, aunque sea por cobrar"... Comentó el elefante hablando con admiración de una elefanta: "Tiene las medidas perfectas: 3600-2400-3600"... En torno de la hoguera del campamento tres cazadores discutían acerca de cuál de ellos tenía más fuerte su parte de varón. Ya se sabe que cazador que no es mentiroso no es cazador. Dijo uno: "Yo maté un oso grizzly golpeándolo con mi atributo varonil". Dijo otro: "Con la misma arma yo di muerte a un puma". El tercero permanecía en silencio. Sus compañeros lo juzgaron inferior a ellos hasta que se dieron cuenta de que el hombre estaba atizando la lumbre con la susodicha parte... En aquel tiempo yo no estaba feliz con ser quien era. Por eso me hice actor, para dejar de ser yo mismo. Eso de ser actor no es un oficio: es una religión. Si quieres morir cada noche hazte actor. Por entonces yo era un joven lleno de juventud. Al decir tal cosa no incurro en redundancia: hay jóvenes llenos de senectud. Podía dedicarme por lo tanto a hacer cosas importantes. E hice teatro. Una de las obras en que subí al palco escénico -así se decía- fue la deliciosa comedia de Enrique Jardiel Poncela llamada Una noche de primavera sin sueño. Nadie lee ya a ese autor que escribía en una mesa del querido Café Gijón, en el Madrid que amo. Por aquellos años, sin embargo, Jardiel era lectura obligatoria. Novelas suyas como Espérame en Siberia, vida mía, o piezas teatrales como Usted tiene ojos de mujer fatal y Eloísa está debajo de un almendro se conocían mucho. En Una noche de primavera sin sueño aparecía un plomero que era en verdad un amigo del esposo...

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