DE POLÍTICA Y COSAS PEORES / Monopolios

AutorCatón

El reverendo Calvínez, predicador de la palabra, casó con la hermana Casiodora, organista de la iglesia. Aunque era algo feíta la escogió como esposa por su reconocido pudor y castidad. En la habitación del hotel donde pasarían la noche de bodas se dispusieron ambos para la ocasión. Vestía él una severa bata de seda negra con pantuflas de nansú morado; ella un discreto negligé de bombasí café con medias de popelina gris. Antes de entrar en el tálamo nupcial el pastor Calvínez pensó que debían ofrecer su matrimonio al Señor, como hicieron Tobías y Sara. Le dijo, pues, solemne, a su mujer: "Ponte de rodillas". "¡Ah, no! -protestó con vehemencia Casiodora-. ¡Cuando lo hago en esa posición después me duele la cabeza!"... Una mujer llegó al consultorio del podólogo. "Tengo un problema -le informó-. Mi esposo y yo trabajamos en un circo. Me pongo una gran roca en la cabeza y él la golpea con un mazo hasta que la hace trizas". "¡Qué barbaridad! -exclamó el podólogo, asombrado-. Pero ¿por qué viene usted a verme a mí? Debería ir con un médico general. Seguramente le duele la cabeza, o el cuerpo". "No, doctor -respondió la mujer-. Se me están haciendo los pies planos"... Una pareja de divorciados se encontraron en la calle por azar. Galante, sin rencores, el marido le dijo a su ex mujer: "Te ves muy guapa. Con gusto volvería a hacerte el amor". Respondió ella, áspera: "Sobre mi cadáver". Contestó él: "Sí, como siempre"... Cualquier monopolio es cosa mala, pertenezca al Estado o a un particular. En última instancia la democracia -y aun la libertad- consiste en la posibilidad de elegir, ya sea entre dos formas de gobierno o entre dos marcas de jabón. Cuando la persona no puede optar entre dos o más bienes, entre dos o más servicios, y debe usar por la fuerza uno, o recurrir obligadamente a un único prestador de algún servicio, entonces su libertad queda severamente restringida, y es fácil víctima de cualquier abuso (me refiero estrictamente a los abusos de orden económico). En México no hemos logrado todavía superar los vicios derivados de las tendencias monopólicas que se instauraron aquí desde la...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR