Poder Legislativo: Diputados de escándalo

AutorMariana Fuentes

Un diputado con aliento alcohólico irrumpe por la fuerza en un programa de televisión que se transmite en vivo. Otro diputado, también alcoholizado, choca en motocicleta, arma un escándalo, termina en la delegación y sale libre gracias al fuero.

Uno más, al salir de un salón de baile decide utilizar la calle como baño, pero es sorprendido por la policía: la imagen del diputado forcejeando y blandiendo su "charola" acaparó las primeras planas y los noticiarios estelares.

También está el diputado que argumenta más con los puños que con las ideas, el que tiene una demanda en su contra por un fraude de 600 millones de pesos y otro que, dicen, hace iniciativas por encargo.

Se trata, en ese orden, del priista Eduardo Andrade, el perredista Félix Salgado Macedonio, el panista Rigoberto Romero, el también perredista Uuc-kib Espadas y los priistas Enrique Ramos y Salvador Rocha Díaz.

De acuerdo con un sondeo realizado por Enfoque entre legisladores y trabajadores de la Cámara de Diputados, los seis anteriores son considerados como los más "exóticos" miembros de la LVIII Legislatura.

Lamentable

Desde el comienzo de la presente legislatura, los diputados se han visto envueltos en diversos escándalos.

Inclusive, en San Lázaro se comenta abiertamente que el día en que se aprobó el presupuesto 2001, hubo diputados que introdujeron tequila, hielos y refresco de toronja. "Mientras unos nos debatíamos entre números otros se emborrachaban", cuentan. Unos más llegaron con almohada a la sesión y otros tenían la maleta lista junto a su curul para irse de viaje.

Al respecto, el investigador Eduardo Guerrero, especialista en estudios legislativos, comenta: "es muy lamentable el nivel escolar tan bajo que tienen y por ello no se pueden esperar comportamientos muy loables".

El profesor de El Colegio de México y candidato a doctor en ciencias políticas por la Universidad de Chicago afirma que, no obstante los excesos de algunos legisladores, "deben seguir disfrutando del fuero porque nuestro Estado de derecho es muy débil y puede dar lugar a abusos. Crear una comisión de ética tampoco sería la solución porque es muy peligroso hacer juicios en cuestiones de moral".

Pero de inmediato aclara: "No obstante, debe castigarse a los diputados que protagonicen este tipo de incidentes".

Al respecto de la evaluación que hizo la Coparmex sobre los diputados, en la que la mayoría salió "reprobada", el investigador dice que "los legisladores deben cuidar su imagen porque están expuestos al examen y evaluación de los medios y el peor castigo es el daño a su imagen pública".

De hecho, agrega, "a los ciudadanos lo que nos debe de importar es que los diputados produzcan nuevas y mejores leyes".

Por su parte, el presidente de la Comisión de Reglamentos y Prácticas Parlamentarias, el priista Augusto Gómez Villanueva, dice: "esta legislatura no ha rebasado en su promedio a las anteriores en hechos, actos o sucesos que puedan llamar mucho la atención".

Sostiene que "la composición de la Cámara, de 500 diputados, debe expresar no sólo la composición social sino también los diferentes estratos educativos y culturales del país".

Rigoberto Romero Aceves: El diputado de la "charola"

"Briagoberto Pomero", llama el diputado perredista Félix Salgado Macedonio a su colega Rigoberto Romero Aceves después del escándalo que protagonizó, el sábado 24 de noviembre, en la avenida Paseo de la Reforma.

Romero Aceves estuvo en el Salón Tropicoso, donde se tomó unas cervezas con sus amigos. Al salir decidió usar la vía pública como baño. Dos policías intentaron detenerlo por la falta administrativa cometida, pero el legislador se opuso. A uno de ellos lo insultó diciéndole: "eres una rata".

Según el testimonio de otros policías, después de gritos, jaloneos y ofensas, los uniformes de sus compañeros acabaron desgarrados. Además, dijeron que el diputado los amenazó diciendo que era muy influyente y que lamentarían lo ocurrido. Cuando uno de los patrulleros le reclamó por su uniforme, el legislador le respondió: "eso te lo rompió tu abuelita".

Entre los forcejeos, Romero Aceves desfajado y despeinado esgrimía la credencial que lo acredita como diputado federal. Al mismo tiempo que exigía lo soltaran, el diputado mostraba su "charola" y gritaba: "ni siquiera mi fuero respetan esos bandidos".

No obstante, hasta los curiosos se opusieron a que la autoridad dejara en libertad a Romero Aceves. La policía, después del enfrentamiento, logró someter al diputado, quien permaneció más de seis horas en la delegación, de la que finalmente salió gracias al fuero constitucional del que gozan los legisladores.

Romero Aceves es diputado plurinominal por Baja California Sur. Nació en el estado de México, pero fue en la península donde obtuvo una pasantía en biología marina, cursó cinco semestres en ingeniería pesquera y donde, según su currículum, realizó gran parte de su actividad política.

Tiene 43 años, era secretario de la Comisión de Pesca pero fue destituido de la misma por su fracción parlamentaria. Hasta el cierre de esta edición no se había dicho nada sobre si seguiría perteneciendo a la de Marina. Ha presentado sólo una iniciativa de ley.

Un diario de su estado publicó: "estamos las sudcalifornianas y...

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