Plasma Millán la guerra

AutorSilvia Isabel Gámez

A Isabel le tocaron en 2008 las balas que iban dirigidas a un vendedor de droga. Un vestido de quinceañera fue su mortaja.

Esta historia, y otras muchas, son reunidas por el periodista Omar Millán en Viajes al este de la ciudad, una crónica de cómo enfrentaron los tijuanenses la guerra contra el narco.

Zona de inmigrantes, el este de Tijuana concentró el mayor número de ejecuciones en el sexenio calderonista. Son 30 colonias donde viven 800 mil personas, la mitad de los habitantes de la ciudad.

"Sin servicios públicos, con rezagos en la educación y el transporte, quise reflejar cómo el narco se alimentó de la zona este, de la marginación", señala Millán.

Está documentado, afirma, que el cártel de los Arellano Félix se estableció en Tijuana en la década de 1980, y creció en gran medida por la apatía de la sociedad y la corrupción de las autoridades.

"Mucha gente sabía incluso dónde estaban las narcotienditas, ya no era una actividad clandestina, pero se dio una especie de síndrome de Estocolmo: 'mejor tenerlos como amigos', 'mientras no denuncies no va a pasar nada'".

La violencia provocó que Tijuana dejara de ser una ciudad nocturna. La gente se refugiaba temprano en sus casas, hasta que se dio un movimiento para recuperar las calles que Millán describe en Viajes al este de la ciudad (Trilce/Conaculta), una edición bilingüe con fotografías de Guillermo Arias y Jorge Dueñes.

Se organizaron festivales gastronómicos, se crearon...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR