Plantea Kyoto al País nuevo reto ambiental
| Autor | Patricia López |
México carece de una política clara en materia ambiental y de acciones concretas para reducir sus emisiones de gases contaminantes a la atmósfera, dice el ecólogo José Sarukhán Kermez.
Para el Premio Nacional de Ciencias y Artes 1990, el reto ambiental implica "una nueva ética sustentable, un cambio tan drástico como el fin de la esclavitud humana en el siglo 18".
Se trata de tener una nueva actitud hacia lo que nos rodea, una cultura de respeto al planeta, a los demás organismos vivos, a quienes no tienen acceso al agua o la energía y hacia las nuevas generaciones, precisa.
A un día del comienzo del Protocolo de Kyoto -que por primera vez obliga legalmente a 141 países a reducir los contaminantes que producen el calentamiento global del planeta-, el investigador del Instituto de Ecología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y coordinador de la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio) se muestra optimista con la nueva herramienta ambiental.
"Es infinitamente mejor tener este instrumento legal funcionando; no es una garantía de que los países se moverán con la misma intensidad, pero sí generará más presión", dice el miembro de El Colegio Nacional.
Sarukhán prevé que serán los países escandinavos y Japón los que marcarán el ritmo del mecanismo ambiental y presionarán, sobre todo, a Estados Unidos.
"El Protocolo de Kyoto es también una presión para México, para incluir el tema ambiental en la agenda nacional y tomar medidas claras que detengan las emisiones contaminantes y el deterioro de los ecosistemas. Está en el discurso, pero no en la práctica", enfatiza.
México es uno de los cinco países megadiversos del mundo, por su variedad y cantidad de ecosistemas y organismos vivos. Pero padece una grave pérdida de su riqueza biológica, en especial en la alta montaña, bosques y selvas.
"Por los efectos del cambio climático, en México algunos sistemas como las altas montañas y los organismos que viven en ellas -muchos de ellos endémicos o exclusivos del territorio nacional- serán más sensibles al daño. El alto endemismo del País está justamente en los sistemas más vulnerables", señala Sarukhán.
En México se están perdiendo los arrecifes del Caribe, los segundos más importantes del mundo. "El Caribe se ha poblado enormemente, y se afecta con basura, drenaje, adiciones de nutrientes que producen cambios importantes y matan a los corales", comenta.
Los ecosistemas son generadores de servicios, como la...
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