Piden a TV UNAM sembrar audiencia
| Autor | Tania Romero |
Es la televisora de la Universidad Nacional, donde se forman unos 350 mil alumnos y se produce cerca del 30 por ciento de los artículos científicos publicados por académicos mexicanos y que este año tiene asignado un presupuesto de 114 millones de pesos. Sin embargo, TV UNAM no la tiene fácil.
El medio universitario cuenta con una tradición de un cuarto de siglo como productor audiovisual, previo a su salida como canal -en transmisión abierta-, en 2005. Apenas hace unas semanas lanzó su plataforma multimedia, pero se quedó sin cabeza.
A principios de mes, Nicolás Alvarado, quien estuvo como director siete meses, anunció su renuncia tras haber publicado comentarios en torno a la muerte de Juan Gabriel, los cuales fueron considerados como desafortunados por muchos y llevaron a movilizaciones en redes y peticiones para que dejara la televisora.
Para Felipe López Veneroni, ex director de Radio UNAM y académico de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, el reto que enfrentan la televisora y los demás medios de la universidad va más allá de quién debe dirigirlos.
"Por una parte, tienen que operar en un campo de relaciones mediáticas dominado ya por ciertos estilos y formas de hacer televisión y, por otra, tienen que mantenerse fieles a su propósito esencial, que no es el de entretener o divertir a un público en abstracto, sino ayudar a difundir y extender el pensamiento científico, sociológico y humanístico que da forma y sentido al quehacer universitario", indica.
"En México, la cultura televisual ha estado fuertemente dominada por una empresa que se ha caracterizado por los contenidos más comerciales y triviales. Se trata de un esfuerzo cuesta arriba".
Lo ideal, agrega, sería adoptar y tratar de adaptar un modelo como el de las televisoras públicas europeas, como la BBC, la Deutsche Welle o Radiodifusión-Television Française.
Sin embargo, acota, no es viable.
"No sólo supone montos de producción imposibles para un espacio como TV UNAM, sino que supone una relación con el público que en México no se ha dado", advierte el académico.
"El modelo al que puede referirse TV UNAM es uno propio y que contenga elementos de las dos televisoras educativas y culturales más antiguas del País: Canal Once y Canal 22".
No se trata de imitarlas, precisa, sino de analizar cómo han ido construyendo un discurso propio para, poco a poco, ir generando un público alrededor de su programación.
El académico cita como ejemplo la programación infantil -entre ella la...
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