Piden más atribuciones para tribunal electoral
| Autor | Margarita Vega |
El ex magistrado electoral Jesús Orozco, planteó ayer modificar la ley para permitir la anulación de comicios presidenciales.
Consideró necesario que la Constitución incluya de forma clara este recurso, pero manteniendo el criterio de que su aplicación sólo debe ocurrir ante causas graves o violaciones a la norma que hayan sido determinantes para el resultado de la elección.
Orozco, uno de los magistrados electorales que calificaron la elección de 2006, indicó que una reforma de esta naturaleza obligará a los candidatos presidenciales a competir con mayor responsabilidad y respeto durante el proceso electoral.
Al participar en el seminario Constitución, Democracia y Elecciones: La Reforma Que Viene, en la UNAM, el especialista agregó que tendría más sentido el trabajo de calificación de la elección que realiza el propio tribunal, si éste tiene la posibilidad de anularla.
Orozco propuso que el tribunal electoral pueda resolver impugnaciones a lo largo de todo el proceso y no sólo hasta que termine la elección, a través de un procedimiento administrativo que permita ir desahogando las quejas que se presenten.
El ahora investigador del Instituto de Investigaciones Jurídicas se pronunció también porque en la reforma electoral no se establezca la posibilidad de un recuento de los votos posterior al que se hace el día de la elección.
Descartó esta posibilidad por la propia seguridad que se tendría que garantizar a los paquetes electorales desde el día de la elección hasta el recuento en el tribunal.
Además, señaló, si se aprueba este mecanismo los electores estarían más interesados en el resultado del recuento de votos que en el resultado del mismo día de la contienda.
Manuel González Oropeza, actual magistrado del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, se pronunció por modificar el formato de la toma de posesión del Presidente de la República.
Propuso que el Jefe del Ejecutivo rinda protesta ante el tribunal electoral y no ante el Congreso.
Justificó que anteriormente el Legislativo era el responsable de calificar la elección presidencial, pero que desde 1996 el tribunal emite la declaratoria de validez, por lo que se debería reformar la Constitución para que sea este órgano quien tome la protesta del nuevo Presidente.
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