Pide FCH asumir responsabilidades

AutorMayolo López

MÉXICO.- El Presidente Felipe Calderón firmó ayer el Decreto con el que entrará en vigor la Reforma Constitucional en Materia de Justicia Penal y Seguridad Pública -tras su publicación en el Diario Oficial de la Federación- y dijo que la lucha contra el crimen organizado no debe ser responsabilidad única del Gobierno.

Calderón recomendó acometer la instrumentación del conjunto de leyes derivadas de la reforma de manera meticulosa para que ésta pueda rendir frutos.

La implementación exitosa, aclaró, requiere del compromiso y la corresponsabilidad de los tres órdenes de Gobierno y de los tres Poderes de la Unión, porque sólo trabajando con unidad se podrá fortalecer al Estado frente a la delincuencia.

Orador en la ceremonia, el priista César Camacho, presidente de la Comisión de Justicia de la Cámara de Diputados, afirmó que la tarea de combatir al crimen atañía fundamentalmente al Ejecutivo Federal, aunque se cuidó de señalar que en ese empeño nunca estará solo.

En su discurso, el Presidente daría puntual réplica al diputado y ex Gobernador del Estado de México.

"Esta, la lucha contra la criminalidad y por la seguridad pública no es una lucha del Gobierno: es una lucha de toda la sociedad, del Estado mexicano, integrado por los mexicanos y sus autoridades, acotó.

"No habrá seguridad garantizada mientras se asuma que la lucha por la seguridad pública es tarea de un solo orden de Gobierno, sea el Federal o cualquier otro; es una responsabilidad de todas las autoridades, de todos los órdenes del Gobierno y un esfuerzo que requiere la colaboración de la ciudadanía, enfatizó.

A juicio del Mandatario, lo que está en juego no es la libertad, la seguridad o integridad de los gobernantes, sino, y sobre todo, la seguridad e integridad de los gobernados.

Por lo pronto, Calderón estimó que la reforma es la más relevante efectuada el sistema penal en mucho tiempo, quizá sólo comparable con la transición del sistema puramente inquisitorial, que rigió hasta principios del siglo pasado, al sistema mixto que operaba hasta ahora.

En ese sentido, Calderón detalló los beneficios que trae consigo la reforma: la adopción de un sistema de justicia penal plenamente acusatorio, con juicios orales y procesos simplificados, lo que también permitirá que la etapa de investigación de los delitos sea más ágil.

El Presidente Calderón sugirió cerrar espacios a la impunidad, a la tolerancia o a la complicidad.

A tono con el discurso presidencial, Juan Camilo Mouriño...

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