Pesos y Centavos / Fumiga tu casa, ponle alto a los bichos
¿Te has sentido amenazado por los bichos? Reacciona y toma el control.
No hay huésped más indeseable y necio que las plagas, y ni pienses que en tu casa ¡nunca!, ya que éstas visitan hasta a las mejores familias.
Uno de los errores más grandes es creer que los invasores son exclusivos de casas sucias o pobres. Aunque sí influye el desaseo, la realidad es que las plagas no hacen distingos y pueden vivir incluso en los sitios con la limpieza más escrupulosa.
¿Quien anda ahi?
Los insectos rastreros y los roedores son la fauna nociva más común en los hogares y son acarreadores de patógenos causantes de males tan comunes como los gastrointestinales y tan graves como el cólera o la hepatitis.
En época de calor los ciclos de reproducción de las cucarachas, las chinches, pulgas y arañas, suele acelerarse hasta conseguir infestaciones y dañar la salud y la economía del hogar.
Viaje sin barreras
Las plagas no pueden exterminarse, pues éstas no "aparecen", sino que viajan en las personas, los equipajes, las bolsas de las compras como frutas y verduras, por lo que nadie está exento de tenerlas en casa.
El control empieza desde la planeación arquitectónica de la casa. Debes evitar los refugios o islas de protección que dificultan la llegada del controlador a las madrigueras, como pisos falsos, plafones, ductos y cableados, los cuales generalmente están fabricados con materiales que puedan roerse (yeso, tablaroca, plásticos).
Luego, debes recurrir a los métodos físicos de control o erradicación, como trampas de pegamento, de golpeo o electrocutadores para roedores e insectos.
Sólo al final, como medida de control preventiva y de erradicación, se recomienda el uso profesional de insecticidas químicos.
De entrada te sirven los productos comerciales -Oko, Raid, Baygón, etc.-, pero como no tienen mucho poder residual no se consigue un control eficaz, pero para evitar que los insectos desarrollen resistencia se recomienda no exceder las tres aplicaciones ni más de una semana.
A raya
La aplicación de insecticidas es riesgosa y debe estar en manos de profesionales reconocidos por las autoridades de Salud. Y los resultados no dependen de los productos, sino de cómo se usan y dónde se aplican.
La práctica corriente es aceptar el trabajo de los "mochileros", personas que venden el servicio casa por casa, generalmente sin controles sanitarios.
Los profesionales efectúan aplicaciones en ciclos de 28 días durante tres meses; si el lugar es muy caliente y húmedo, el...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba