PERSPECTIVA EMPRESARIAL / Calidad o cantidad
| Autor | Carlos Hermosillo |
La grave situación de inseguridad que estamos padeciendo es producto de muchos años de negligencia de los gobiernos, de todos los niveles, por no atacar el problema antes de que se hiciera tan grande, y no es producto, como se nos quiere hacer creer, únicamente del Gobierno actual.
Sin embargo, no me queda duda que será responsabilidad de los Gobiernos actuales ponerle un remedio aplicando toda la capacidad y fuerza del Estado, principalmente para reducir la impunidad.
La ineficacia con que se ha tratado este problema es un reflejo de las torcidas prioridades de nuestros políticos que hacen que su más alta prioridad sea mantenerse en el poder, en lugar de dedicar su tiempo y esfuerzo a atender los más apremiantes problemas de la sociedad.
Hago mía la expresión de Alejandro Martí de que detentar un puesto público a sabiendas de que no se tiene la capacidad es una forma de corrupción, y yo agregaría que la peor de todas. De estos casos estamos llenos en el Estado de Jalisco.
Hace algunos días MURAL publicó un reportaje informándonos que México tiene más policías por habitante que muchos otros países que tienen índices de criminalidad mucho más bajos, lo cual nos hace reflexionar sobre la necesidad de revisar de fondo el asunto de la calidad de las Policías.
En otras páginas algún editorialista plantea la conveniencia de tener la mitad de los policías ganando el doble, en lugar de muchos mal capacitados y mal pagados.
Un buen inicio sería cambiar la práctica de tener divididas a tantas policías, pero especialmente la parte de prevención que está (o debería estar) bajo la responsabilidad de los Municipios. En el caso concreto de los agentes de vialidad es un absurdo que se les destinen recursos para atender únicamente asuntos de vialidad cuando con la misma patrulla y equipo podrían intervenir en asuntos de prevención de cualquier delito, como es en cualquier país civilizado.
Agentes, que ahora son sólo de vialidad, capacitados y mejor pagados podrían hacer un mejor uso de los recursos, como sueldos, patrullas, equipo de comunicación, etcétera, y con toda seguridad, con el mismo presupuesto se podrían lograr mejores resultados.
En otros países no ve uno tantas patrullas y policías como aquí y sin embargo se tienen niveles de delito inferiores, lo cual indica que si bien pudiera ser menos probable que alguien que estuviera violando la ley fuera visto por un policía, es evidente que dado el caso, la inminencia de ser detenido y procesado es...
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