Perciben poca ética

AutorRebeca Pérez Vega

Podría intuirse tráfico de influencias y es poco ético el préstamo del edificio de la Secretaría de Cultura de Jalisco (SCJ), recinto histórico que en cuatro meses fue escenario de un par de banquetes privados, definió el arquitecto y perito del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Ignacio Gómez Arriola.

"Nadie puede sacar un usufructo privado de un espacio público y en el caso de bodas, de 15 años, de todo ese tipo de usos que son inadecuados e irregulares, muchas veces lo que sucede es que hay una especie de tráfico de influencias, que le piden el favor a algún funcionario que puede tomar la decisión y el funcionario, que seguramente no está muy bien formado, dice que sí es viable", advirtió Gómez Arriola.

MURAL publicó que en diciembre de 2015 y en abril pasado, el edificio Zaragoza, sede de la SCJ, albergó dos bodas. Por el préstamo del inmueble del siglo 19, monumento histórico por determinación de ley, la dependencia apenas recibió una donación en especie de vidrios y material para impermeabilizar el espacio.

Para la arquitecta y estudiosa del patrimonio, Arabella González, los recintos históricos manejados por el Gobierno del Estado podrían ser rentados, pero a partir de un manual que delimite los espacios que pueden utilizarse y que obligue a quien lo rente a que cumpla con las restricciones de uso por el tipo de edificio. Caso contrario a lo que ocurrió en el banquete de bodas de diciembre pasado, en donde se utilizó hasta pirotecnia que puso en peligro el recinto, calificó González.

"Cuando los presupuestos para cultura están tan castigados, estos inmuebles pueden ser aprovechados para generar recursos que se apliquen exclusivamente en la restauración del mismo edificio u otros que se encuentran en mal estado...

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