Paz Flores / Libertad vs. miedo

AutorPaz Flores

La ejecución de un diputado local frente al Palacio Municipal avisa la urgencia de detener el caos. Cualquiera de los escenarios posibles que haya causado esta ejecución habla de un tejido en descomposición. Ahora, decir que es un crimen contra todo el Estado parecería una forma hacer grande este asesinato para con su sombra ocultar la causa específica.

Generalizarlo, de tal modo que este crimen abarque al Estado completo, pareciera una técnica para ocultar la verdad.

En muchos modos, el narco entabla contienda contra el Estado, pero no creo que esta ejecución, en específico, tenga que ver con tal aseveración.

La ola de asaltos en restaurantes, casas particulares y hasta en centros comerciales son una consecuencia indirecta de la guerra narca, porque ésta pone en evidencia a una ciudad vulnerable, en la que el caos deja ver su abrumador equipaje.

Esta guerra genera la percepción de una ciudad vulnerable, una ciudad-terreno-fácil, en donde, entre tanto crimen, es sencillo ocultar más delitos; donde, entre tanto ejecutado, un asesinato más ¡que más da!; donde, entre tanto alebreste, otro tipo de delitos como el robo hace creer a los asaltantes que pasa desapercibido.

El desorden hace parecer sencillo cualquier tipo de atraco, mas no necesariamente debe ser así.

Creo que la sociedad regiomontana está alerta y es mucho menos apática de lo que algunos imaginan, creo que esta sociedad reacciona rápido y con fuerza a cualquier situación que sea verdaderamente trascendente o justa.

No debemos permitir que nadie nos quite nuestro derecho de ciudad. La ciudad es nuestra y bajo ninguna circunstancia debemos ser cooptados mentalmente por el miedo.

No sólo es importante no ser vulnerables, es necesario no parecerlo. Es un fenómeno exponencial, que debemos detener. Ser cautos, medidos y seguir reglas de seguridad no es lo mismo que tener miedo. El miedo no es bueno, nunca.

En momentos de crimen y guerra es lógico que la libertad de los ciudadanos sea reglamentada, pero nunca permitamos que abusen o la obstaculicen, de ninguna manera consintamos que el miedo rija, porque si das el brazo a torcer, te lo doblan más.

Es necesario fijar un punto de equilibrio y no permitir que se pasen utilizando toda vía legal que sea necesaria.

Si hay retenes porque son necesarios, muy bien, pero que las reglas sean claras para que no se violen garantías individuales, los derechos humanos. Deben crearse mecanismos efectivos de réplica ciudadana en caso de que los derechos...

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