Paz Fernández Cueto / PISA 2009
| Autor | Paz Fernández Cueto |
El informe PISA (Programme for International Student Assessment), que la OCDE elabora cada tres años a partir de exámenes realizados a alumnos de 15 años de numerosos países, se ha convertido en la principal obra de referencia sobre calidad de enseñanza en el mundo globalizado, enfocándose a evaluar las competencias de nuestros jóvenes. Al arrojar resultados académicos normalizados, permite comparaciones internacionales que arrojan pistas sobre qué funciona y qué no funciona en educación, sugiriendo a los países más rezagados adoptar estrategias exitosas y modernizar las prácticas docentes, para mejorar sus resultados.
Es a partir del año 2000, cuando México empieza a participar en PISA, compitiendo por primera vez en el ámbito internacional en materia de educación. Nunca antes nuestro país se había sometido a evaluaciones comparativas, ni internas ni externas, y menos aún se habían dado a conocer durante décadas los resultados académicos de los alumnos. Todo se mantenía en lo obscurito dentro del status quo de lo políticamente correcto, con el objeto de salvaguardar la hegemonía del poder, criterio muy alejado al de privilegiar por encima de todo la calidad de la enseñanza.
Con la alternancia llegó una nueva cultura de transparencia y rendición de cuentas, afrontando el riesgo que significa dejarse evaluar, es decir, mostrar al desnudo deficiencias y rezagos ancestrales de un sistema educativo heredado, que ya ha sido rebasado por el tiempo.
¿Qué nos dicen los resultados de PISA 2009, después de haber evaluado a más de 475 mil estudiantes en lectura, matemáticas y ciencias, de 65 países, de los cuales sólo 34 son miembros de la OCDE? Si nos comparamos con estos 34 entre los que se encuentran Alemania, Italia, Francia, España, Gran Bretaña o Estados Unidos, seguimos ocupando los últimos lugares. Cabe aclarar que en esta lista no sólo están los económicamente poderosos, también figuran países que han atravesado crisis financieras importantes como Grecia y Portugal, y otros más de recién ingreso a la OCDE, como Eslovenia, Eslovaquia, Chile, Israel, países que han logrado en tiempos relativamente cortos revertir en positivo sus resultados.
Por lo que se refiere a la prueba PISA, México aparece junto al grupo de países latinoamericanos que están por debajo de la media de la OCDE, casi al mismo nivel que Uruguay, por encima de Argentina, Brasil, Colombia Panamá y Perú, así como del promedio global de América Latina. Sin embargo...
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