Paz Fernández Cueto / ¿Puede un político ser honesto?

AutorPaz Fernández Cueto

Parecería que no. Casi no hay día que no se den a conocer actos de corrupción ligados a algún político, o datos sobre actos de corrupción ligados a historias archivados en el olvido. La impunidad es la mejor aliada de la corrupción, por tanto, los políticos piensan que vale la pena arriesgarse, lo más seguro es que no los vayan a descubrir si hacen las cosas con habilidad. Hay que aprovechar la oportunidad que les brinda el destino para amasar una fortuna considerable, algo que les agradecerán sus hijos y sus nietos sin causar mal a nadie. Se trata de facilitar trámites y acuerdos, hacer que las cosas funcionen y el País camine más ágilmente. Y si para eso hay que echar mano del lubricante de la mochada, bienvenida sea.

Pensábamos que con la llegada del PAN, el partido ciudadano, el partido de la gente decente, de los profesionistas honestos, de los que lejos de robar ponían de su bolsa, las cosas iba a cambiar. Que después de esa brega de eternidad de los panistas de antaño, sin más incentivo que el ideal de lograr una patria ordenada y generosa, apoyados por la ciudadanía, íbamos a tener un México diferente. Que después de 70 años de hartazgo del PRI, mismos que dieron lugar a la alternancia, se abrirían horizontes de prosperidad y justicia, no en beneficio de unos cuantos políticos, de aquellos a quienes hizo justicia la revolución, dejando a la mayoría del país sumido en la desesperanza y en la pobreza, sino que íbamos a ser capaces de generar riqueza y oportunidades para todos. México es un País inmensamente rico, de gran proyección hacia el futuro, es así como nos percibe la comunidad internacional en comparación con otras naciones. Para vergüenza nuestra, México -no siendo un País pobre- es un País de pobres, con enormes desigualdades e injusticias, en el que no hemos logrado abatir la pobreza extrema y sus consecuencias más nefastas. Bien decía un amigo diplomático, después de haber vivido en nuestro país por varios años, haber descubierto en México un País de gente noble y trabajadora, y una clase política terriblemente corrupta.

Justo es reconocer avances significativos que se lograron...

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