Un parque de memorias

AutorAlejandro Alvarado

Detrás de cada cosa hay una historia qué contar, pero la del Parque Morelos también la tejen los personajes a su alrededor a base de nostálgicos recuerdos.

Apenas tenía 6 años de edad y Jorge Mora (1959), quien es dueño de La Fuente, el negocio de raspados más antiguo de los que rodean la vieja Alameda, ya paseaba por los jardines, jugaba cascaritas de futbol y hasta rentaba por un cuarto de hora bicicletas para recorrer el parque que se planea rescatar para los Juegos Panamericanos.

"Desde que recuerdo siempre he venido a la nevería a trabajar, cuando estaba en la primaria ya tenía el compromiso de venir a lavar vasos. Era mi compromiso entre semana y los domingos desde las 3 de la tarde hasta las 7 de la noche", recuerda.

La Fuente existe desde 1938 y su fundador fue José Sánchez, que hasta el 57 la vendió a Ezequiel Mora, padre del actual dueño. En aquel entonces apenas se ofrecían 10 sabores, ahora son más del triple, pero siempre el dulce de coco y nuez son los más vendidos.

Mora presume que también su nevería guarda muchas historias. Seguido llegan parejas a consumir raspados y le comentan que aquí fue su primera cita o su primer beso.

"Las mejores ventas fueron en los 60, 70 y todavía parte de los 80, en aquellas épocas no había tantas plazas comerciales, tantos cines y bares, no había dónde la gente saliera el fin de semana a tomarse algo y venían aquí", dice.

A pesar del descuido del parque, agrega, la tradición de la nieve raspada sigue vigente aunque no con el mismo auge, pero sí fuera del lugar porque en colonias y otros municipios se venden estos preparados estilo Parque...

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