Palabra y fe / La Sagrada Familia

Pbro. Juan Jaime Soto

Muy queridos hermanos: En este domingo celebramos la fiesta de la Sagrada Familia.

El niño Jesús, Santa María y San José forman para nosotros el ideal de una familia que aspira a la santidad. Y una familia santa no es aquella que no tiene problemas familiares, sino la que los enfrenta y soluciona con amor.

Esto lo podemos descubrir en el hermoso pasaje del Evangelio de este día, conocido por nosotros como el niño perdido y encontrado en el templo.

En torno a la fiesta de Pascua, en aquella época las peregrinaciones al templo de Jerusalén eran largas y con muchos peregrinos. Por el tipo de peregrinación había la confianza para que los niños se moviera con libertad, más si hablamos de que Jesús ya era un adolescente de 12 años. Por lo que no es extraño que no se notará su ausencia por largos periodos de tiempo.

Así que cuando sus padres se dieron cuenta de que el niño no estaba, regresaron a Jerusalén.

El momento del encuentro entre los padres y su hijo es muy ejemplar, pues en el interrogatorio la madre expresa la preocupación al decirle: "Hijo mío, tu Padre y yo te hemos estado buscando con angustia".

Podemos imaginar la carga emocional de María como madre angustiada, pero que al mismo tiempo mantiene la ecuanimidad y está dispuesta a escuchar los argumentos del hijo para entrar en un diálogo.

Algo que considero importante en la buena relación ente padres e hijos es la buena...

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