Pagan 50 mil pesos por Erika

Los médicos que atendieron el parto de la joven Erika Plascencia, que murió desangrada tras el alumbramiento, recibieron ayer el auto de formal prisión, aunque se encuentran libres bajo fianza desde la tarde del jueves.

Además del pago de la fianza, la Jueza Patricia Gudiño Rodríguez determinó que Gustavo y Marco Antonio González Hernández garantizarán un pago de 50 mil 297 pesos por la reparación del daño a la familia.

La Jueza impuso una fianza de 180 mil pesos a cada uno, y en el caso de Marco Antonio se sumaron otros 75 mil pesos por el delito de usurpación de profesión.

Cada uno de los inculpados tuvo que exhibir un billete de depósito de 25 mil 148 pesos con 50 centavos, que es el equivalente a 730 días de salario mínimo, por concepto de reparación del daño para la familia de la víctima.

Aunque los hermanos Gustavo y Marco Antonio González Hernández fueron consignados por el delito de homicidio culposo, a Marco Antonio se le agregó el delito de usurpación de profesión debido a que no está titulado como médico y se ostenta y ejerce como tal.

Luego de rendir su declaración preparatoria el abogado defensor de los inculpados solicitó el beneficio de libertad bajo fianza, el cual les fue concedido por la Jueza 41 Penal, Patricia Gudiño Rodríguez.

No obstante que los inculpados salieron bajo fianza el proceso penal continúa toda vez que ayer a las 12:30 horas se les notificó el auto de formal prisión decretado por la Jueza.

Los hermanos González Hernández atendían a sus pacientes en un local habilitado como consultorio en la calle de Fray Juan de Padilla...

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