Paga y libra cargo por planta chatarra

AutorAbel Barajas

México.- Alonso Ancira recuperó ayer su libertad luego de que fuera aceptada su oferta de pagar una reparación del daño por el caso Agronitrogenados.

Sonriente, de traje negro y camisa blanca, con un habano en mano, el empresario abandonó el Reclusorio Norte ayer a las 19:30 horas en una camioneta G-500 Mercedes Benz, color negro, placas 303VF. No hizo declaraciones a la prensa.

El dueño de Altos Hornos de México (AHMSA) estaba procesado sólo por el lavado de 3.5 millones de dólares, dinero con el que presuntamente sobornó a Emilio Lozoya para que Pemex le comprara a sobreprecio la planta "chatarra" de Agronitrogenados en el complejo de Pajaritos, Veracruz.

Sin embargo, el acuerdo reparatorio que suscribió el empresario, y que ayer aceptó Pemex ante un juez federal, fue por 216 millones 664 mil 40 dólares a pagar en tres entregas de 72 millones 221 mil 346 dólares cada una, los días 30 de noviembre de 2021, 2022 y 2023.

El principal punto de desacuerdo que mantuvo trabada la negociación y retrasó la liberación del imputado fueron el número de pagos, pues Ancira había ofrecido inicialmente hacerlos en cuatro años y al final terminó por aceptar que fueran en tres, como lo requirió Pemex.

Si bien el Gobierno federal siempre sostuvo que AHMSA "infló" el valor de la planta para venderla a Pemex en 274 millones de dólares, el sobreprecio nunca fue materia de imputación penal.

Es decir, nunca le fincó un ilícito relacionado con el precio desproporcionado, aunque sí le cobró la supuesta sobrestimación de 216 millones de dólares como reparación del daño.

Lo único que fue materia de la imputación es el monto del presunto soborno a Lozoya.

En una audiencia presidida por Artemio Zúñiga, juez de control del Centro de Justicia Penal Federal del Reclusorio Norte, Pemex ratificó ayer el acuerdo reparatorio al que llegó con el dueño de la siderúrgica.

Mauricio Flores, abogado de Ancira, dijo que durante la audiencia sólo la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) se opuso a la suscripción del acuerdo, alegando que el monto pactado era menor al daño ocasionado; sin embargo, su renuencia no prosperó.

"La UIF pobremente se opuso, simplemente refirió que el monto podía ser mayor, pero el juez no acordó favorablemente", dijo.

Una vez aprobado el acuerdo, la Fiscalía General de la República pidió la suspensión condicional del proceso y, al concederlo, el juez ordenó la libertad del empresario.

Debido a que la planta "chatarra" fue adquirida con recursos de Pemex...

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