Pablo Lemus / Definiciones de Aristóteles y Alfaro

AutorPablo Lemus

Con la puesta en marcha del proceso electoral, el pasado 7 de octubre, ha llegado el momento de las grandes decisiones de cara a las precampañas que iniciarán en la última semana de diciembre. Los partidos políticos y los candidatos deberán definir los perfiles con los que competirán en el proceso del próximo 7 de junio.

Las últimas encuestas muestran que Enrique Alfaro Ramírez, de Movimiento Ciudadano, resultaría ganador en cualquiera de los Municipios en que elija competir, ya sea Guadalajara o Zapopan, pero la decisión es compleja, pues será el escalón que le permita llegar a la candidatura al Gobierno del Estado en 2018.

Guadalajara da una amplia plataforma en reflectores y peso político, que pueden ayudar a crecer su imagen; ante la ciudadanía del Estado y nacional sigue pesando más la tarjeta de presentación de un Alcalde de la Capital que una de Zapopan, basta con recordar que los últimos tres Gobernadores de Jalisco emanan de la Perla Tapatía: Francisco Ramírez Acuña, Emilio González Márquez y Aristóteles Sandoval.

Sin embargo, ello tiene también altos riesgos: es la Ciudad más endeudada del País, un Municipio prácticamente quebrado, no habrá muchos recursos para obra pública, la Federación difícilmente brindará grandes apoyos a un Gobierno que podría arrebatarle al partido tricolor la Gubernatura del Estado; otro cáncer será la corrupción arraigada en la burocracia tapatía, la abultada nómina que no responderá a los intereses del alfarismo (son empleados del PAN o del PRI) y el ambulantaje, que será un dolor de cabeza.

Zapopan es el Municipio con mayor crecimiento económico del Estado, el que atrae las mayores inversiones, que si bien tiene también un alto nivel de endeudamiento, sus finanzas tienen un margen de maniobra que permite que las acciones de un Gobierno puedan ejecutarse con mayor celeridad, pero su plataforma mediática y política es mucho menor; un logro importante en Guadalajara puede ser nota nacional, uno en Zapopan será siempre nota local.

Habrá otra decisión importante para conquistar la mayor cantidad de votos, Alfaro debe hacerse acompañar por candidatos que lo completen y le ayuden a calentar la elección. La única forma en la que MC derrotará al voto duro del PRI es con una participación mínima del 50 por ciento del electorado, cifra nada fácil de alcanzar en una elección intermedia, por lo tanto, deberá elegir perfiles que polaricen y metan pasión a la campaña.

Para que su proyecto pueda...

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