Logra Osiel ascenso veloz tras asesinar a sus aliados
| Autor | Abel Barajas |
Osiel Cárdenas Guillén tiene un récord que no lo compara ninguno de los grandes capos de su nivel: en cinco ocasiones ha sido capturado tanto en México como en Estados Unidos y de todas ellas ha salido librado por diversos medios, incluso por la evasión.
Sin embargo, en esta sexta y última captura será ingresado a La Palma y pisará por primera vez en su vida un penal de máxima seguridad, del cual nunca ha escapado ninguno de sus internos desde que empezó a funcionar en 1991.
Su historia es la de un personaje nacido en una familia humilde, que fue obrero y mecánico antes de escalar en el mundo del crimen organizado, donde se convirtió en un devoto de la brujería y en el capo más precoz del que se tenga memoria.
Su corto paso y su gran ascenso en el mundo delictivo son el ejemplo más claro de la movilidad social que ofrece el tráfico de drogas. Cárdenas Guillén nació el 18 de mayo de 1967 en Matamoros, Tamaulipas, y a los 30 años ya era uno de los hombres más buscados por Estados Unidos.
A los 14 años, Osiel se fue a vivir a la casa de su hermana Lilia y se dedicó a trabajar como ayudante de mecánico, mesero y empleado de una fábrica maquiladora, según las declaraciones de su esposa, padres y hermanos.
Estudió hasta la secundaria y a los 18 años se casó con Celia Salinas Aguilar, entonces empleada de una maquiladora con quien se fue a vivir al taller mecánico donde trabajaba. Allí es donde empezó a vender grapas de cocaína.
El 16 de febrero de 1989, cuando tenía 21 años, fue detenido por primera vez en Matamoros por los delitos de homicidio, abuso de confianza y daños en propiedad ajena, dentro del proceso 350/900. No obstante, sólo pasó una noche en el penal de Matamoros y salió bajo fianza.
Un año más tarde, el 7 de marzo de 1990, volvió a pisar la prisión por la causa penal 82/88, instruida en su contra por lesiones y amenazas, aunque también salió bajo fianza el mismo día. Hasta ese momento, nunca había estado en la cárcel por drogas.
Sin embargo, a los 25 años de edad eso cambió. El 27 de agosto de 1992 Cárdenas Guillén fue detenido en Brownsville, Texas, bajo el proceso B-92-00214-01, instruido por el Juez de Distrito Meridional de esta entidad estadounidense por delitos contra la salud en su modalidad de posesión de 2 kilos de cocaína.
Esto le valió su ingreso a la prisión del Instituto Correccional de Greatplants, y un año después, el 13 de enero de 1993, fue sentenciado a 5 años de cárcel -63 meses- y a una multa de 50 dólares, misma...
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