Origen en pugna

AutorÁngel Rivas

Su nombre hace creer que vienen de Francia, pero existen documentos que avalan que las papas a la francesa o fritas se elaboraban desde el siglo 17 en las costas de Bélgica, durante el invierno, cuando no se podía pescar.

"En Francia se defiende que la "papa frita Puente Nuevo" fue inventada por los vendedores ambulantes del puente más antiguo de París (Pont Neuf), pero para los belgas nació en Namur. Sus habitantes, acostumbrados a pescar en el río Meuse, en los inviernos particularmente duros cuando el agua se congelaba, cortaban papas en forma de pequeños peces y las freían", relata Eric De Maeyer, chef belga a cargo del Hotel Live Acqua Cancún.

Hoy las papas fritas son parte de la cultura belga y se consideran patrimonio nacional. Lo mismo acompañan un paseo por las calles, que una cerveza en cualquier bar, una película en casa o se sirven como guarnición de mejillones, estofados y carne tártara.

"Cada ciudad o pueblo tiene un frietkot (puesto callejero de papas) y una extensa gama de salsas para acompañar; está por ejemplo la mayonesa, reina de las salsas en Bélgica, catsup y mostaza, cocktail (mayonesa, catsup y brandy), samourai (mayonesa, catsup y sambal ulek, una pasta de chiles indonesios), curry, tártara, bearnesa o chasseur (vino tinto y mantequilla)", describe.

La receta original belga dicta que las papas...

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