Orden de AMLO de desobedecer a jueces exhibe a México como país sin ley
| Fecha de publicación | 27 Noviembre 2022 |
- El que se volvió a volar la barda fue el presidente López Obrador al pedir a funcionarios federales que desobedezcan a jueces cuando éstos ordenen la liberación de algún detenido si consideran que hubo corrupción en su proceso. Molesto por la decisión de la Corte de eliminar la prisión preventiva forzosa para delitos fiscales, al primer mandatario lo primero que se le ocurrió fue ordenar a los encargados de aplicar la ley…¡ignorarla! Lo grave del tema es que la orden presidencial atenta contra el Estado de Derecho, convierte al mandatario en delincuente, expone a funcionarios que lo sigan a ser procesados por desacato judicial y pinta al país ante el mundo, otra vez, como un lugar donde las leyes no valen nada.
- Para la inteligencia de la Secretearía de la Defensa, el asesinato del general José Silvestre Urzúa Padilla, jefe de la Guardia Nacional en Zacatecas, es responsabilidad del Cártel Jalisco Nueva Generación, en respuesta a la presión que el ejército ha venido ejerciendo en la entidad donde al menos cuatro grupos delictivos se disputan el control no sólo de las actividades delictivas, sino del territorio estratégico para el tránsito de drogas hacia territorio de los Estados Unidos. Como sea, Urzúa es el militar de mayor rango asesinado en lo que va del actual sexenio y su ejecución representa un abierto desafío del crimen organizado a la presente administración. Lo peor del caso es que contra la delincuencia organizada no se ve una política articulada e integral, en Palacio Nacional insisten en la vacilada de “abrazos no balazos”.
- Como aviador, Salvador Martínez Della Rocca, un viejo activista del 68 y destacado integrante del CEU en 1986, cobra hoy en el gobierno capitalino como “coordinador general A”, la nada despreciable cantidad de 99 mil 967 pesos mensuales, sin hacer absolutamente nada. Ex alumno de la Facultad de Ciencias de la UNAM y antropólogo por la Escuela Nacional de Antropología, El Pino para sus cuates, tuvo un gris desempeño como Secretario de Educación del entonces Distrito Federal en 2012, diputado federal, diputado local capitalino y no se le recuerda por una destacada actuación como delegado en Tlalpan de 1997 a 2000. Al “luchador social” contra la corrupción, la revolución le hizo justicia, ha sabido arrimarse donde hay, a sus 77 años vive becado y sin preocupaciones económicas, no como la mayoría de los pobres jubilados de este país. ¿cuántos cuates más están enquistados en...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba