Yo opino / Cierra la boca

Es increíble la capacidad de Vicente Fox para enredar las cosas sin necesidad.

Al principio cuando se hizo popular gracias a sus campañas, algunas de sus declaraciones y dicharajos eran graciosos y tal vez le ganaron muchos votos, pero tal parece que nunca entendió que una vez como Presidente de la República sus declaraciones tenían un peso y significado muy diferente, pues ya no era Vicente Fox el que hablaba sino el Presidente de México.

Una de las peores fue aquella cuando dijo que los norteamericanos necesitaban a los inmigrantes mexicanos para hacer los trabajos que ni los negros (que desde hace años son afroamericanos, pues llamarles negros es peyorativo e insultante) querían hacer, lo cual provocó reacciones muy molestas en los Estados Unidos y el reverendo Jesse Jackson vino a entrevistarse con Fox buscando una disculpa. Si las mismas palabras las decimos usted o yo en la reunión con los amigos no pasa absolutamente nada, pero el Presidente de un país (a menos que sea alguien tan tarugo como Chávez) no puede andar diciendo esas cosas.

Ahora nos sale con otra perla, que nadie le pidió y que está siendo de gran utilidad para la oposición, pues decir que durante su sexenio se salió a la calle para estar en contacto con el pueblo y dejó la oficina encargada es una soberana estupidez, pues se presta a toda clase de malas interpretaciones, como ya las están...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR