Opinión Invitada / Marcelo González Jiménez: Propuestas sí, payasadas no
| Autor | Opinión Invitada |
Cuatro candidatos a la Alcaldía de Monterrey sostendrán un encuentro hoy en las instalaciones de
EL NORTE. Resulta un espacio de diálogo ideal para atraer el interés de los ciudadanos por el futuro político de nuestra Ciudad.
Este tipo de ejercicios deben propiciar la argumentación y la presentación de políticas públicas sobre aspectos que pueden y deben mejorarse, de no ser así se corre el riesgo de convertirse en agujeros sin contenidos ni propósitos que sólo dan lugar a extravagantes frivolidades y caricaturas grotescas.
Es desalentador que no existan restricciones que impidan que cualquier tipo de sanguijuela política tenga acceso a una candidatura.
Este hecho es motivo suficiente para asegurar que la política local atraviesa por una severa crisis que no permite visualizar nuevos liderazgos capaces de presentar futuros prometedores.
Por estas razones, el 1 de julio veremos en la boleta -además de los fieles a sus partidos- a personajes claramente identificables en tres grupos: el primero, los que renunciaron a sus institutos políticos al no ser considerados para ocupar posiciones redituables y parece que son incapaces de ganarse la vida por medios diferentes a la política; el segundo, los totalmente ridículos y descolocados que sólo juegan a ser bufones o payasos al servicio de otros intereses; y el tercero, los totalmente desconocidos.
Ninguno de los candidatos que integran alguno de los tres grupos logra posicionarse como una oposición seria y capaz de impedir la reelección de Adrián de la Garza, sólo el panista Felipe de Jesús Cantú tiene posibilidades reales de disputarle al priista la Alcaldía de la Ciudad. La encuesta de EL NORTE publicada hace un par de semanas así lo refleja.
Si bien la Alcaldía de Adrián no ha sido un desastre, como la de su antecesora panista Margarita Arellanes -postulada a una Diputación federal plurinominal por el PT-, un aspecto en su contra es la grisácea personalidad que lo envuelve, más digna de un mando policiaco que de Alcalde de la capital de un Estado como Nuevo León.
Este bajo perfil que se obstina en manejar es el que impide que un gran sector de la sociedad pueda observar los logros que dice haber alcanzado, que, al parecer, sólo...
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