Opinión Invitada / Alberto Villanueva: Caso Marinela en las redes

AutorOpinión Invitada

Por varios días ha estado circulando en redes sociales un video de un empleado de Marinela, que es grabado cuando se encuentra surtiendo producto en una tienda, donde en el momento en que no lo observa la persona que está detrás del mostrador, el repartidor toma producto del que está colocando en el exhibidor y lo guarda en el interior de su ropa, lo que hace suponer de inmediato que está haciendo algo indebido.

La imagen hasta el momento ha generado más de 1 millón de vistas en YouTube, y a consecuencia de ello, los memes no se han hecho esperar, como se aprecia a manera de ejemplo, en una foto en distinta tienda en la que una persona de pie sujeta un bate de beisbol ubicada a espaldas de un repartidor que coloca producto en el exhibidor, y en la parte inferior una leyenda que dice "Cuidando al de Bimbo, porque ya no se sabe".

Este tipo de acciones tienden a generar calificativos negativos de manera inmediata contra el repartidor, de la propia empresa y todos sus empleados, lo cual parece entendible si el observador del video aprecia que se puede estar cometiendo una injusticia en contra de una persona, pero en modo alguno se justifica que sólo con base en ese video se ataque a la empresa de la forma en que se ha hecho o se califique a todos sus empleados de ladrones.

Marinela y Bimbo son parte del mismo grupo de negocios, con presencia de más de 70 años en el mercado, convirtiéndose en una de las empresas más importantes de México y una de las panificadoras más grandes del mundo, contando con una filosofía de responsabilidad social reconocida por acciones emprendidas a favor de sus colaboradores, los propietarios de misceláneas, el medio ambiente, la salud, la nutrición y la sociedad.

De acuerdo con el reporte emitido por Grupo Bimbo a diciembre de 2017, su plantilla laboral se encuentra integrada por mas de 138 mil empleados, por lo que cabe hacer un alto para analizar el caso que nos ocupa.

El video no es conclusivo, porque sólo muestra parcialmente la imagen cuando el repartidor se encuentra frente a la cámara, pero en el momento en que sale del cuadro ya no se sabe qué sucede, pues se alcanza a escuchar que hay una conversación no identificada con alguien distinto de la persona que se encuentra...

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