Oops, rompen una porcelana

AutorRebeca Pérez. Con información de Juan Carlos Sagredo

Luego de concursar en el Premio Nacional de la Cerámica de Tlaquepaque, el pequeño "Cascabel Capullo" regresó a manos de su autora, Daniela Solís, en pedazos cuidadosamente pegados.

La directora del Patronato del Premio, Kathya Nambo, acepta la responsabilidad. Define que este año, la convocatoria registró mil 900 piezas de 900 artesanos de todo el País, pero apenas 55 personas se encargan del control de las obras.

Define que no es responsabilidad del Patronato regresar las piezas a sus autores en diversos Estados del País (es decir que cada artesano debe regresar por su obra), pero alguien de su equipo decidió reenviarle el "Cascabel Capullo" a la artesana en Puebla.

En el transcurso nadie le avisó a Solís que su pieza se rompió y algún empleado del Patronato decidió pegarla por propia iniciativa.

"Nunca reportaron se había roto, es un insulto que la mandaran pegada; si la hubieran mandado rota, hubiera pensado que la mensajería fue la responsable, pero no, llegó cuidadosamente pegada", recuerda Solís.

Cuando notificó del hecho al Patronato solicitó una disculpa, una aclaración y el reembolso de los mil pesos que cuesta la pieza, pero los organizadores no aceptaron el error y le depositaron 200 pesos en una transferencia bancaria, que corresponde al cinco por ciento del valor total de la pieza.

"Cascabel Capullo", de porcelana, concursó en el Premio Nacional de la Cerámica en la categoría de Cerámica en Miniatura bajo el registro 0661.

OFRECE DISCULPA

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