Ojo Clínico / ¿Es sano ser vegetariano?

AutorEnrique Goldbard

De una dieta cuyo origen se remonta a la antigüedad, practicada por cuestiones de fe, tradición o necesidad, han brotado (en esta moderna época del mercado de la vida sana) toda clase de ramificaciones y modalidades. La dieta vegetariana es ahora el epítome de la salud.

Con la reputación de prevenir todo tipo de enfermedades crónicas, desde las de altísima mortalidad, como los padecimientos cardiovasculares y el cáncer, hasta algunas de escaso riesgo, como el acné o la migraña, el vegetarianismo es una especie de mantra que repiten no sólo quienes por siglos lo han practicado en el Oriente -budistas e hindúes-, sino quienes en el Occidente se han incorporado a este movimiento.

Es mucha la gente famosa a quien se ha atribuido la adhesión a esta forma de alimentación, entre ellos: Leonardo Da Vinci, George Bernard Shaw, Charles Darwin, Franz Kafka, William Shakespeare, Vincent van Gogh, Albert Einstein y muchos otros. No se sabe con certeza sobre estos y otros personajes que se mencionan, qué tanto tiempo siguieron su dieta, qué tipo de vegetarianismo observaban o si su hábito no era más que una pose, la cuestión es que hay cada vez más nombres incorporados en las páginas dedicadas a la corriente de abstenerse de comer productos de origen animal. Más aún, cuando se trata de estrellas del espectáculo, su apego a estas dietas dura habitualmente menos que sus matrimonios.

En la actualidad se guardan diferentes tipos de vegetarianismo, desde la forma más estricta (veganismo), en la que no sólo se evita la carne de todo tipo de animal terrestre o marino sino que se dejan de comer sus productos como los lácteos o los huevos y de usar productos de piel, hasta modalidades más indulgentes como es el caso de los ovo-vegetarianos (comen huevo), lacto-vegetarianos (comen lácteos) u ovo-lacto-vegetarianos, así como aquellos que se permiten comer pescado y mariscos. Se habla incluso de un estilo de vida vegetariano, en el que además de la dieta se agrega el amor por los animales.

El caso es que el vegetarianismo se ha vuelto enormemente popular, sobre todo en el país en el que toda costumbre ancestral se transforma en moda, los Estados Unidos. Alrededor de 8 millones de norteamericanos se consideran...

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