Ofrecen peritaje a favor de Valdés
| Autor | Édgar Alejandro Hernández |
Resulta una injusticia que el editor Fernando Valdés se encuentre preso por "especulación comercial", afirma María Teresa Romero, perito decano en materia de propiedad intelectual e industrial.
La también directora de la Agencia Nacional de Propiedad Intelectual explica que Valdés, recluido desde el pasado 7 de agosto en el Reclusorio Norte, no comercializó copias ilegales o piratas de la serie de cuadernos Gader de educación básica, sino obras originales del libro escrito por Graciela y Valentín Rincón.
Las hermanas Graciela y Mireya Rincón, hijas del fallecido autor, acusan al director de la editorial Plaza y Valdés de haber violado el Artículo 424 Bis del Código Penal.
Tras la acusación obtuvieron una orden de cateo para que la Procuraduría General de la República (PGR) entrara a la editorial Plaza y Valdés, de donde fueron decomisados 3 mil 157 ejemplares del título, además de que se detuvo al editor.
Romero realizó un dictamen pericial, cuya copia posee REFORMA, a petición del abogado del editor, Gerardo Huerta, para presentarlo como una documental privada dentro del incidente de libertad por desvanecimiento de pruebas que solicitó la defensa y que debió haber sido fallado el pasado 28 de diciembre.
La audiencia para la resolución, que de ser favorable permitiría la libertad inmediata a Valdés, se pospuso para el 9 de enero, ya que salió de vacaciones el Segundo Juez de Distrito de Procesos Penales Federales, José César Flores Rodríguez.
De acuerdo con las conclusiones de Romero, quien también es árbitro del Instituto Nacional del Derecho de Autor, la hipótesis bajo la que se encarceló a Valdés no tiene sustento penal.
El Artículo 424 Bis del Código Penal, explica Romero, penaliza a quienes vendan copias de obras protegidas por la Ley Federal del Derecho de Autor, en forma dolosa, con fin de especulación comercial, y sin la debida autorización que en términos de la ley debe otorgar el titular de los derechos de autor.
"En principio, es importante aclarar que el propio juez no otorgó el auto (de formal prisión) por reproducción de copias ilícitas, ya que determina que las copias fueron producidas luego de que el autor cedió a la editorial los derechos de la obra.
"Esto significa que el propio juez aceptó que Valdés no produjo copias piratas, sino obras originales, que fueron autorizadas por el autor mediante un contrato, donde también se estipula que de haber controversia entre las partes debe meditarse por la Ley Federal del Derecho de...
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