Ofrecen a internas un renacer social

AutorImelda Robles

Es día de visita. La fila se extiende para ver a los hombres. Por el contrario, para entrar a verlas a ellas la afluencia es marcadamente menor.

Se trata de un escenario común en el Penal del Topo Chico, el único reclusorio en Nuevo León para mujeres. Actualmente son 574.

La sociedad cobra una factura más alta a una mujer que está en prisión que a un varón, afirma Martín Carlos Sánchez, director de Renace, organización que desde hace más de 20 años trabaja por transformar la justicia penal en México.

"Resulta que las mamás, las hermanas, señalan mucho más duro a las mujeres cuando cometen un delito", dice Sánchez.

"Esto implica que la familia no está pendiente del proceso penal, de las oportunidades que tenga para quedar en libertad, que no son las mismas de un hombre a una mujer.

"Los hombres siempre van a tener a la mamá, a la esposa, a la hija, a la hermana, o a alguna novia que lo vaya a ver. En cambio, la mujer no tiene eso".

Ante el olvido de ellas, 12 mujeres apoyan el proyecto Mujeres por Renace, con el que buscan enseñarles oficios para que al salir del penal realicen algún producto artesanal de calidad y lo vendan a buen precio.

Quieren convertirlas en microempresarias y que salgan adelante con su trabajo.

"A veces no tuvieron antes las oportunidades y aquí buscamos darles las herramientas y oportunidades de cursos, de superarse", enfatiza Mónica Elosúa, integrante del proyecto.

Lydia Madero, también parte del equipo, expresa que las mujeres que entran a un programa de este tipo transforman su vida.

"Ellas se van a dar cuenta de lo que viven y de lo que son capaces. Eso es lo más importante, que se den cuenta de lo que valen y lo que pueden lograr por sí mismas, aun estando ahí", comparte Madero.

El pasado 31 de marzo la Comisión Nacional de Derechos Humanos señaló que el área de mujeres del Penal del Topo Chico tiene una sobrepoblación del 58 por ciento, ya que su capacidad es de 362 internas y ahora son 574.

Además, la CNDH alertó que las mujeres ahí internas sufren golpes, amenazas, humillaciones y discriminación. También, afirman, hay prostitución y mafias.

PREPARARSE LAS HACE FUERTES

Desde su detención las mujeres son más vulnerables a sufrir abusos, lamenta el director de Renace.

Roxana es un ejemplo.

En octubre pasado se paralizó cuando unos oficiales, de modo agresivo e insultándola, le mostraron diferentes identificaciones con su foto, pero con nombres y firmas diferentes.

La joven de 22 años, quien estudió técnica en...

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