Ofician Misa en Catedral por los desaparecidos

Don Ernesto Vidal está sentado en una de las primeras bancas de la Catedral de Monterrey con un estandarte de San Óscar Arnulfo Romero, un Arzobispo salvadoreño defensor de los derechos humanos que en 1980 fue asesinado mientras oficiaba una misa.

Tiene 84 años, vive de una pensión del Seguro Social tras haber trabajado 30 años como obrero en una empresa.

Hace siete meses tuvo un infarto, y comenta que a veces se revuelve con las fechas.

Su esposa está delicada de salud y no pudo acudir a esta misa que realizan desde hace cuatro años, el último lunes de cada mes para pedir por personas desaparecidas. La de ayer fue presidida por el Padre Luis Eduardo Villarreal, fundador del albergue Casanicolás.

En el cartelón que don Ernesto se cuelga del cuello con listones se lee:

"Sr. Lic. Gustavo Adolfo Guerrero, Fiscal Gral. del Estado de Nuevo León: Mi hijo Ernesto Efraín Vidal Flores cumple 8 años de desaparición forzada, mismos años que tengo de buscarlo. ¿¿¿Y ustedes señores???".

Efraín tenía 30 años y estudiaba criminología cuando el 11 de abril del 2011 un grupo...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR