Ocurrió en Mi Escuela

Por Alicia López

12 años

Muchas veces he contado esta historia, pero mis amigos y mis primos dudan que sea verdad, pero de veras ocurrió en mi escuela.

Cuando iba en segundo año de primaria tenía un maestra que se llamaba Graciela. Al principio me pareció que era una maestra buena onda, pero con el tiempo las cosas se fueron haciendo difíciles.

La clase de educación física nunca me ha gustado mucho porque en las competencias siempre quedo en último lugar y en los ejercicios me canso mucho. La maestra se dio cuenta de eso y a mí me hacía dar más vueltas y me ponía más ejercicios. Casi todo el año saqué 5 en educación física.

Pero eso no fue lo peor. Lo peor fue cuando un día la maestra le dijo a mis papás que yo platicaba mucho en las clases. Ellos me regañaron y dijeron que no platicara más o me iban a castigar. De veras que yo ya no platicaba con nadie ni hacía nada, pero aun así, la maestra le decía a mis papás que yo seguía portándome mal.

Otra vez me lastimé el pie y falté a la escuela algunos días, entre ellos el día del niño. Cuando regresé ella preguntó que a quién no le había dado regalo del día del niño. Dos compañeros y yo alzamos la mano, pero sólo a ellos les dio el regalo, a mí no. Dijo que ya no tenía.

Otras veces ella dejaba una tarea, y mi mamá me la revisaba para que estuviera bien, y la maestra decía que la había hecho mal o que no la había traído completa porque era una distraída. Traté de convencer a mis papás de que yo le caía mal a la maestra y que me traía de encargo. Al principio ellos no lo creyeron...

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