El octavo pasajero / Ausencia

Ayer creí encontrarte en esta mi estación Xola (Chola, para los cuates), te acercaste, me miraste fijamente, tu boca, tu linda boca temblaba, apretabas tus manos contra los bolsillos de tus jeans a la cadera.

Y al fin, cuando pronunciaste esa frase: '¡hola amigo! ¿aquí puedo transbordar para Centro Médico?

En ese momento me di cuenta de que no eras tú a la que yo esperaba, que no eras esa niña que me propusiera algo para mitigar la soledad de mi alma y cuerpo, y yo soñando despierto pensando que al fin mi suerte había cambiado.

Cuando vi que te marchabas pensé 'no importa, aún tengo otra oportunidad, será la que va subiendo las escaleras? o aquella que va bajando del gusano naranja?, quizás será otro día cuando te encuentre y ese día te comeré a besos, ese día te tomaré de la mano, caminaremos y no me cansaré de acariciar tu rostro, de estrechar tu cuerpo contra el mío, de sentir tu respiración...

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