Nuevo rumbo de vida
| Autor | Alejandra Atilano |
Joel Chávez desde los 13 años comenzó a consumir alcohol y drogas, dentro de la pandilla a la que pertenecía se dedicó a robar y a traficar con cocaína y mariguana, pero esa experiencia cambió más tarde su vida y su destino tomó un rumbo que jamás imaginó.
Ahora Joel se dedica a ayudar a otros jóvenes que como él estuvieron atados a alguna adicción, viven en pandilla, han dejado sus estudios o tienen problemas dentro de su casa o colonia.
Su fuerza de voluntad, sus ganas de vivir y salir adelante, su amor hacia Dios, pero sobre todo la fe de que no hay límites y todo es posible de lograr, hicieron que Joel con tan sólo 18 años de edad comenzara un movimiento que logra que jóvenes pandilleros y adictos se rehabiliten.
Ese esfuerzo, 14 años más tarde, es Barrios Unidos en Cristo, una institución que ha logrado ayudar a miles de jóvenes con problemas delictivos y de adicciones, que tiene un centro de atención integral, casas de rehabilitación y trabajo en las colonias más conflictivas de la zona metropolitana de Guadalajara.
Para Joel el futuro no estaba definido, no tenía alguna ilusión particular en la vida, ni el estudio ni algún oficio, su entorno se desarrollaba entre la pandilla y las drogas.
"Pero no sólo era la cuestión de la pandilla sino que era la delincuencia, empezamos a robar, asaltar y todo aquello y entonces vinieron las drogas también y empezamos a usar y abusar de ellas, de tal manera que empezaron los problemas también en la casa", platica.
Tanto sus hermanos como él formaban parte de las pandillas, en su casa, una familia de 12 hermanos, reinaba la violencia, las malas conductas y el problema de drogas.
"Hasta que de plano llegó un momento difícil de decir: bueno esto tiene que cambiar, yo ya había hecho un intento por dejar las drogas y no lo logré, fue sólo un pensamiento",
"Llegó ese momento depresivo, fue un 22 de agosto del 87 donde decidí no usar drogas una semana, esos momento de una cruda realidad, gracias a Dios fue la semana más larga de mi vida, a la fecha ya no volví a probar las drogas".
Meses después acudió a un encuentro juvenil, eso cambió totalmente su vida y gracias a esa experiencia comenzó la idea de trabajar con jóvenes.
"En enero del 88 yo ingreso a un encierro y eso me reafirma, aunque yo llevaba ya tiempo sin consumir y bueno, de aquí nace toda esta intención de Barrios Unidos porque una semana después de que yo vivo este retiro a mí me invitan a servir a uno".
Por medio de esta oportunidad Joel...
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