Nueva ilusión azul

AutorLuis Homero Echeverría

MURAL / Enviado

SAO PAULO.- Es la segunda vez, menos nervio, más ambición, seguros de sus fortalezas y conscientes de sus errores, quizá por ello La Máquina lució tranquila, con los motores aún apagados, pero el carbón listo para encenderse.

Ni las turbulencias que sacudieron en la noche al vuelo 8671 impidieron que los azules disfrutaran el viaje, que lo asimilaran con más paciencia, sin perder el buen humor.

Ese lo puso en gran parte del viaje y en honor a su apodo, el "Loco" Sebastián Abreu, quien se quitó la camisa y la corbata y prefirió viajar con la playera de entrenamiento, eso sí, corrió al baño antes de descender para cambiarse y salir igual que todos a la calle.

Porque los demás no perdieron la pulcritud, el mayor ejemplo lo colocó Sergio Almaguer, al rociar con su loción a la línea de asientos donde viajaban Pinheiro, Flavio Davino y el "Loco".

"Un poco de aroma para que se quite el olor a pies", les dijo Almaguer.

Y es que los tres jugadores se ubicaban justo en frente del monitor más amplio en el avión y después de que intentaran cubrirse la cara con bolsas y mantas para no ver la película Spirit, decidieron quitarse los zapatos y subir los pies sobre la imagen.

Más tarde, Abreu y Palencia decidieron ir a la parte de atrás de la aeronave a despertar a Tomás...

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