Novelan amor de Napoleón

AutorYanireth Israde

Napoleón Bonaparte, conquistado en el crepúsculo de su vida por una adolescente inglesa, revive en Viento amargo, novela de Beatriz Rivas que explora el vínculo entre el gran corso y Elisabeth Balcombe.

Recreación de las conversaciones que ambos personajes tuvieron en la isla de Santa Helena -a donde el militar llegó en 1815 para cumplir su destierro-, el libro fue presentado en días pasados en el salón de un restaurante del Bosque de Chapultepec.

Alrededor de 400 invitados acudieron a la cita, entre ellos el protagonista del volumen, salido como de una estampa escolar y flanqueado por dos guardias, listo para acercarse hasta donde la escritora Guadalupe Loaeza comentaba la obra.

Pero antes de que el guerrero atravesara el sitio con ínfulas imperiales, Loaeza destacó que Viento amargo (Alfaguara) muestra un Napoléon humano, frágil, necesitado de cariño y ajeno al estereotipo.

Bonaparte, nacido en Córcega en 1769, se revela como un hombre falible en las conversaciones que mantiene con Balcombe, personaje al que, según Loaeza, pocos historiadores han dado importancia.

Elisabeth, Miss Betsy, de 14 años, vivía con su familia en la isla cuando Napoleón llegó a ese sitio ubicado al sur del océano Atlántico. Allí, virtualmente prisionero, permaneció hasta su muerte, en 1821.

"El ex emperador rescata por fin su capacidad para sorprenderse, para maravillarse. Pero sobre todo, lo que logra Betsy es que a su lado él tiene la impresión de olvidarse de sus culpas: culpa por haber reducido a cenizas naciones enteras, culpa por haber matado y por haber desencantado a tantos seguidores", refirió la autora de Las niñas bien.

Gracias a estos diálogos, el lector se entera de que Napoleón acostumbraba apoyarse en los obstáculos para poder superarlos, apuntó.

"Que ganaba las batallas con una perfecta combinación de imaginación y razonamiento. Que siempre estaba preparado para improvisar, y que no buscaba la felicidad sino la gloria, entre otras muchas cosas".

A la presentación siguieron los comentarios de Rivas, quien fue interrumpida por un Napoléon que aprovechó la oportunidad de reencarnar en un actor para expresar su pensamiento en frases como: "Mi única amante fue el poder. Si quieres llegar lejos, apréndete esto: el amor estorba", o: "No se...

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