Nombres, Nombres y... Nombres/ Eliminarán presentación del sector público en IMSS

AutorAlberto Aguilar

DESDE QUE EN enero se dieron a conocer las nuevas directrices para modificar la mecánica de proveeduría de medicamentos en el IMSS, le he platicado del tema, en función de la importancia que tiene para ese instituto que dirige Santiago Levy, máxime sus crecientes dificultades financieras.

El plan tiene como objetivo mejorar ese servicio a los derechohabientes, al eliminar vicios y fallas y dar entrada a nuevos proveedores para acceder a condiciones similares como las que se tienen en las farmacias privadas. Además se pretende descargar en la IP el costo de almacenamiento y distribución y reducir hacia el 2006 el peso de esa actividad, para que el instituto pueda concentrarse en apuntalar la atención a la salud.

Aunque en términos generales el espíritu del esquema suena bien, en la industria se insiste en que no es compatible con la realidad y menos si se realiza con la velocidad impuesta. Al no prepararse una red privada con alcance nacional, hay el riesgo de entregar ese segmento del negocio a Grupo Saba de Isaac Saba y Nadro de Pablo Escandón. Este nos aseguran ha sido de los que más han empujado ese concepto, aprovechando su estrecha relación con el titular de Salud, Julio Frenk.

El tema de la proveeduría ha vuelto a salir a colación dado que hace unos días ya se informó al medio lo que será la estrategia de abasto para el primer semestre del 2003. Es más, las licitaciones arrancarán a mediados de este mes que comienza bajo la supervisión del director administrativo del IMSS, Luis Guillermo Ibarra.

Resaltan un par de asuntos. Uno de ellos tiene que ver con el abasto ya directamente de medicamentos a las unidades hospitalarias de alta especialidad que son 69, esto a partir de enero del 2003.

Es otro paso para desconcentrar las compras de medicamentos. Previamente de siete unidades regionales se había pasado a 38 zonas. Ahora a esto se sumarán esas clínicas que son las más sofisticadas, dado que ahí se atiende enfermedades como cáncer, sida, diabetes y cirugías cardiacas.

Se cree que para el segundo semestre del 2003 se seguirá con el abasto a la infraestructura de segundo nivel y que gradualmente se avanzará hasta individualizar la cobertura de los mil 800 unidades con que cuenta el IMSS.

Se reitera que la actual red de distribuidores no cuenta con la infraestructura para atender ese universo y que es una falacia creer que podrán desarrollarse proveedores regionales. Hoy éstos no existen porque la industria farmacéutica creció concentrada...

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