Cuando el nombre no basta
Señor Futbol / Redacción
París.- Nunca se ha ganado un partido con el solo impacto de una camiseta y un nombre, y una vez más lo acaba de corroborar la selección de Brasil, al escribir uno de sus grandes fracasos, pues el actual campeón del mundo fue eliminado en la primera ronda de la Copa Confederaciones Francia 2003.
El scratch du oro requería ganar para seguir con vida, pero la sorprendente Turquía, alentada por una ferviente grada, le arrancó un empate 2-2 a un monarca del mundo que pareció impresionado y que así se convirtió en la primera selección brasileña absoluta que es eliminada en la primera fase de un torneo oficial desde el Mundial de 1966.
De esa manera los turcos vengaron su eliminación en la Copa del Mundo del 2002, en los pies de la verdeamarelha, y gracias a este empate ocupó la segunda plaza del Grupo B de la Confederaciones y disputa la Semifinal contra el anfitrión Francia, en el Estadio de Saint Denis.
La otra Semifinal la jugarán este mismo jueves 26 de junio, pero en Lyon; los Leones Indomables de Camerún contra el que se perfila como la sorpresa de este torneo, Colombia.
Los franceses se aseguraron la primera plaza del Grupo A al aplastar 5-0 a Nueva Zelanda en un partido de trámite en el que los campeones de Europa preservaron su físico ante un rival que no creó ninguna sensación de peligro. Mientras que un bello gol del "Príncipe cafetero" Giovanni Hernández, los colombianos vencieron 1-0 a Japón, para con ello lograr el pase a Semifinales.
Los Leones Indomables, con la clasificación ya asegurada, no tenían mucho que temer de Estados Unidos. De hecho "Winnie" Schaefer, su técnico, aprovechó la ocasión para dar minutos a los suplentes, poco preocupado por terminar, en el peor de los casos, en el segundo puesto del grupo.
Los cameruneses disputaron de este modo un partido intermitente ante unos estadounidenses deseosos de despedirse con buen sabor de boca, pero que no lograron marcar la diferencia. El resultado fue un empate sin tantos, el primero desde el comienzo del torneo.
Sin menoscabo para Estados Unidos y Camerún, el lunes por la noche todas las miradas estuvieron fijadas en Saint-Etienne, en donde, a la misma hora, Brasil y Turquía se disputaban la plaza de Semifinales que aún quedaba por adjudicar. El encuentro tenía un aire algo familiar, ya que los dos países protagonizaron dos fabulosos duelos hace exactamente un año, en Ulsan, Corea del Sur y Saitama, Japón, en los que los turcos habían perdido sin ser...
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