Nomás no aprenden
| Autor | Fernando Vanegas |
Se les fue vivo el León, también los Tigres y anoche el Cruz Azul.
El Monterrey volvió a dejar ir un triunfo en casa pese a ir ganando. Fue el Cruz Azul de Pedro Caixinha el que hizo el daño.
Ni siquiera una ventaja de dos goles es garantía en el Estadio BBVA Bancomer, donde los Rayados han entregado ocho puntos en total, incluyendo los que cedieron ante el Puebla y están cada vez más lejos de la cima del Clausura 2019.
Volvió a fallar la estrategia, pese a lo ocurrido contra La Fiera, que los alcanzó tras un 2-0 o contra Tigres, al que le ganaban 1-0, en el Monterrey no aprenden la lección.
De un 2-0, el Cruz Azul sacó un empate 2-2. El director técnico Diego Alonso ya dejó muy claro que se morirá con la suya.
A lo sucedido en los juegos como local cuando empataron pese a que iban ganando se le puede sumar lo ocurrido ante Pumas como visitante. La fórmula no está funcionando.
Alonso también demostró que no termina por descifrar a Caixinha, a quien sólo le ha ganado uno de siete enfrentamientos, aunque esta vez se dio el primer empate entre ellos.
Un golazo de chilena de Avilés Hurtado justo antes de irse al descanso parecía poner a los albiazules en ruta a un triunfo que calmara las aguas después de dos derrotas al hilo en la Liga y la Liga de Campeones de la Concacaf.
El gol de César Montes arrancando el segundo tiempo confirmaba el dominio del Monterrey que se reflejaba en una mayor posesión de balón y en ocasiones de gol creadas.
Sin embargo, llegó un momento en el que desde la banca se mandaron señales que, quizá, iban orientadas hacia el cuidado de jugadores clave pensando en la "Conca", pero echaron por la borda un partido que puede ser relevante más tarde en la Liga.
Salieron del campo Carlos Rodríguez y Dorlan Pabon y, lógico, el Monterrey perdió peso en el mediocampo y a la ofensiva, porque Pabon había dado las dos asistencias.
Con el ingreso de Jonathan González y Jesús Gallardo la disposición del equipo fue otra, cedieron el balón al Cruz Azul y éstos empezaron a construir la remontada.
El primer gol de La Máquina llegó después de que a Rodolfo Pizarro lo derribaron en el área y el árbitro Eduardo Galván no marcó la falta, por lo que la jugada continuó.
Parecido a lo que sucedió en Tijuana, nadie pudo detener la jugada y terminó en un certero remate de cabeza de Milton Caraglio entre Stefan Medina y Leonel Vangioni.
Le quedaban poco menos 15 de minutos al partido y el juego conservador del Monterrey combinado con la agresividad...
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