Noche y Día / Plenitud de los performances

AutorSergio González Rodríguez

Ya Maquiavelo distinguía que la política es un juego de teatralidad. Ahora, con el triunfo de lo virtual y lo inmaterial por la cibercultura, la función de la apariencia ha logrado rangos superiores.

La decadencia política en México hace posible también que contemplemos un escenario en el que los performances institucionales se confunden con los que tienen signo contrainstitucional.

Por un lado, está el orden constituido con sus inercias posrevolucionarias y reformistas que se han acumulado a lo largo de los años, y por otro se halla el rencor de los desafectos de dicho orden al que ahora combaten después de tener desavenencias electorales.

Los primeros llaman a refugiarse en la legalidad establecida, los segundos se violentan contra ésta. En ambas posturas pervive una urgencia de credibilidad que transmite cierto aroma de melancolía por los tiempos en los que se carecía de estas disputas, basta ver la forma en la que se busca reafirmar un ceremonial que imponga respeto.

Sin embargo, pocas cosas pueden ser peores que la parodia de los que se dicen defraudados en una elección en la que, después de ganar gran parte de lo que estaba en pugna, pero no la Presidencia, se niegan a reconocer la legalidad con la que jugaron, autonombran a un presidente "legítimo" y se lanzan a instaurar un gobierno "alterno".

Al margen de las banderas ideológicas que presuman, es la demostración flagrante de un declive institucional del que son protagonistas y cómplices en tanto clase política.

Así, se acude a un performance que paga un alto tributo a la nostalgia debido a su ritual "juarista", que ha hecho de Benito Juárez una irrisoria hagiografía laica.

Furio Jesi hacía notar que el género de la parodia aparece cuando la fuente que la origina ha desaparecido mucho tiempo atrás, y se expresa como un anhelo por el origen cuya pérdida debe ser compensada por la imitación nostálgica.

Ahora que la decadencia institucional en México ha impuesto estragos fundamentales como el extravío del Estado de derecho, la disputa entre el Estado y el crimen organizado respecto del ejercicio de la violencia, que debería ser exclusivo del primero, o bien, el auge de la subcultura contra la...

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