Que no habrá rifa

Ante la imposibilidad de vender el avión presidencial, el Presidente Andrés Manuel López Obrador propuso ayer no rifarlo, sino organizar un sorteo para repartir, entre 100 boletos ganadores, los 130 millones de dólares que equivalen a su valor.

Anunció además que el TP-01 -, un Boeing 787-8, permanecerá un año más en manos del Gobierno, en hangares de la Fuerza Aérea, tras amarrar un contrato de arrendamiento por 200 millones de pesos con un empresario.

"Lo que se rifa es dinero, el dinero del avión, en vez de uno, que sean 100 los premiados y entonces se distribuye el monto del costo del avión. Podrían ser 100 con 20, 25 millones de pesos para cada uno", planteó.

Detalló que tiene programado reunirse con empresarios para que colaboren con la venta o colocación de 4 de los 6 millones de boletos de la Lotería Nacional, que tendrán un costo de 500 pesos cada uno.

El resto podrían ser vendidos al público por los billeteros.

-¿Qué pasaría entonces con el avión, ya no lo entregarían, quedaría resguardado?- se le preguntó.

-Se va a hacer un avalúo, se define cuánto cuesta, se hace la rifa de acuerdo al valor del avión, y en vez de un premio, hay 100 premios de 20 o de 25 millones. El cálculo del avión es de 2 mil a dos mil 500 millones de pesos, de acuerdo a los avalúos, tanto el de la ONU como el de Hacienda.

"El avión queda en custodia de la Fuerza Aérea porque se paga a los que ganen. Se renta, ya hay un contrato de renta de un año para el avión, para pagar mantenimiento, combustible, depreciación, estacionamiento, todo, que se calcula en 200 millones al año", respondió.

El...

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