Cómo no quererlas

AutorAdrián Basilio

Hoy en día prácticamente toda competencia deportiva tiene a la suya y en la historia se encuentran desde animales y frutas hasta humanoides o robots en los que se fusionan las tradiciones de los países sede de esas competencias de gran envergadura como los Olímpicos o Campeonatos Mundiales.

Las mascotas forman parte de la identidad y hasta del legado de una competencia como las justas avaladas por el Comité Olímpico Internacional (COI) pues las primeras de ellas surgieron en la edición invernal de Grenoble, Francia, en 1968, y hasta cuatro años después llegaron a una cita veraniega, en Munich 1972.

1 MUY PERRÓN

El perro salchicha Waldi fue la primera mascota de unos Juegos Olímpicos de Verano, en Múnich 1972. Mostraba la cabeza y la cola en color azul y su cuerpo tenía líneas verticales con los colores de los Aros Olímpicos.

2 OSITO CARIÑOSITO

Misha (Moscú 1980), cautivó por su "llanto" en la clausura ante la falta de deportistas de muchos países que boicotearon la cita por temas políticos. Este oso era tan recordado y emblemático que reapareció en los Juegos de Invierno de Sochi 2014.

3 MUY ARTÍSTICA

Los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992 están muy presentes en el colectivo también por su mascota: un perro catalán de nombre Cobi inspirado en el arte cubista de Picasso. Cobi incluso tuvo su propia serie animada en España.

4 FRACASOTOTE

Tan extraña resultó la mascota de Atlanta 96 que las palabras "Qué es esto", de la cual derivó su nombre: Izzy, sonaba de forma incrédula. Fue tan rara que no llamó la atención y nunca conectó con la gente en las competencias y fue un fracaso comercial.

5 FAUNA POR TRES

Los...

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