Ya no están en hileras y calladitos

AutorEsmeralda Martínez

Porque los tiempos actuales demandan una manera de enseñar distinta, los modelos de enseñanza ya no pueden considerar a los alumnos como si todos fueran iguales; hay que enseñarles de una manera innovadora y muy personalizada.

Por eso, el Instituto Americano ha creado el programa i-PAL (Innovative, Personalized Attention and Learning, por sus siglas en inglés), que significa innovación, aprendizaje y atención personalizada.

Esta manera de enseñanza-aprendizaje tiene dos años de aplicación en el instituto y es el resultado de cuatro años de investigación.

"Está enfocado a cada alumno. Ése es el punto de partida de la maestra; primero verifica qué saben y qué pueden hacer sus alumnos, porque no todos tienen el mismo nivel de conocimiento", comenta la la directora del Instituto, Elizabeth W. Huergo.

En base a ese análisis, i-PAL divide a los alumnos en grupos de acuerdo a sus niveles de conocimiento y habilidades, y de ahí se prepara una clase diferenciada, en donde en un salón puede haber dos, tres y hasta cuatro grupos para los cuales se están preparando actividades diferentes, de acuerdo a cada nivel.

"Con este sistema, la maestra ya no prepara una lección para un grupo de alumnos sentados en hileras y calladitos, ahora se ve mucha acción en el salón de clase, en donde los niños están más interesados desarrollando proyectos y dialogando entre ellos para encontrar las mejores soluciones, a medida que trabajan en grupo.

"La colaboración es una cualidad indispensable dentro de estos grupos, ya que los ayuda a trabajar en conjunto con personas en su mismo salón y a través de la tecnología, porque parte del programa es que los alumnos trabajen con niños de otras partes del mundo vía internet, para que juntos participen en el desarrollo de proyectos.

"Esto los obliga a conocer de otras culturas, a respetarlas y adaptarse a horarios diferentes, a maneras de ver procesos diferentes, a dialogar y llegar a acuerdos".

El enfoque principal, dice, es trabajar con los niños, para que ellos se hagan responsables de su aprendizaje, en lugar de aprender lo que la maestra les enseña.

"Somos una sociedad muy enfocada a la calificación que se saca, y el chiste es darle la vuelta a la calificación, que aunque tiene su...

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