Como yo, no hay dos

AutorCésar Huerta

Para las figuras del ambiente del espectáculo, el nombre artístico es sagrado. Tanto, que muchos de ellos afirman que lo llevan grabado en la piel y permanecerán con él hasta la muerte.

Sin embargo, desde hace unos días más de mil artistas, entre los que se encuentran gente de la talla de Carmen Montejo, Demian Bichir, Edith González y José Alonso, han perdido la exclusividad de su nombre por no haber actualizado sus datos ante el Instituto Nacional de Derechos de Autor, dependiente de la SEP.

Y aunque manifiestan su temor de que cualquier persona, sea o no artista, pueda utilizar nombres como el de Diana Bracho y Antonio Aguilar para explotarlos a nivel comercial, aceptan desconocer los detalles del proceso.

Sólo algunos actores como José Carlos Ruiz y Regina Torné, se enteraron que tenían que cumplir con sus obligaciones ante el INDA.

"Recibí un aviso de la Asociación Nacional de Actores acerca de esto, pero se me hizo estúpido, que se me olvidó y hasta ahorita lo estoy recordando ", comenta la actriz de la cinta 'Como Agua para Chocolate'.

Al igual que Torné, Tiburcio Gabilondo, hijo del compositor Francisco Gabilondo Soler "Cri-Crí ", reprobó la manera en que se dio a conocer la noticia a través del Diario Oficial de la Federación el 14 de agosto.

"El problema fue la manera en que procedieron las autoridades ", dice, "publicaron la lista de manera abrupta y tomaron desprevenida a mucha gente ".

Una opinión que respalda sin cortapisas Alonso, actor de la cinta 'La Tarea', quien además expresa que todo es para sacar más dinero al pueblo mexicano.

"¿Es como el Renave?, ¿qué genocida hay detrás de esto?", bromea, "no tengo inconveniente en pagar una cuota, pero se me hace absurdo tener que hacerlo por un nombre que es el mío ".

"Lo que voy hacer ahora es informarme bien de todo esto y platicaré con algunos camaradas para ver qué acciones se pueden tomar o si no se hace nada ", agrega.

Algunos actores coinciden en que no moverán "ningún dedo "para registrarse y acusan al Instituto de promover impuestos con tal de obtener dinero a manos llenas.

"Lo único que me provoca es una carcajada tremenda. Ahora resulta que debo refrendarlo, registrarlo y no lo entiendo. Qué leyes son esas, creo que sólo lo hacen para desviar la atención de problemas verdaderamente importantes. Me parece ridículo que después de haber utilizado 36 años mi nombre(el real)me vengan a cobrar derechos para tenerlo. . . ¡es increíble!", subraya Bichir, cuyo nombre es Demian...

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