'¡No disparen, no disparen!'
| Autor | Jesús Guerrero |
CHILPANCINGO.- El 26 de septiembre, 80 normalistas de primer año de la normal rural de Ayotzinapa, conocidos como "Los Pelones", tienen una misión: llevar a la escuela tres autobuses.
En el intento, 3 hallan la muerte y 43 son desaparecidos por policías municipales y sicarios en Iguala, Guerrero.
Semanas antes, el Congreso Nacional de Organizaciones Sociales establece que el comité estudiantil de Ayotzinapa debía tener 26 autobuses para el traslado a la marcha del 2 de octubre en el DF a fin de conmemorar el 48 aniversario de la matanza de Tlatelolco.
El 26 de septiembre, seis días antes de la movilización, hay en la cancha de futbol de la escuela sólo 19 autobuses. Urge conseguir otros 7.
Una parte de los estudiantes que días antes participan en el secuestro de la mayoría de estos camiones se encuentra en clase; otros realizan labores de limpieza en las porquerizas y los campos de cultivo de la normal Raúl Isidro Burgos.
Después de las 10:00 horas, salen de la normal rumbo a la capital del Estado, donde, con el rostro cubierto, pretenden llevarse algunos autobuses. Sin embargo, elementos de la Policía estatal y del Ejército se lo impiden.
Los jóvenes se trasladan entonces a Iguala en dos camiones con la intención de tomar otros tres. Antes realizan labores de boteo en el cruce de la carretera que conduce a Tepecuacuilco y Huitzuco de los Figueroa, municipios que forman parte del bastión del grupo delictivo Guerreros Unidos.
Al mismo tiempo, en la explanada del Ayuntamiento de Iguala, María de los Ángeles Pineda, esposa del entonces Alcalde José Luis Abarca, rinde su informe de labores como presidenta del DIF local.
Cientos de carteles, lienzos y mantas anuncian el evento, que significa el virtual destape de Pineda para buscar la Alcaldía en las elecciones de 2015 bajo el apoyo de la corriente Nueva Izquierda del PRD.
Después de las 19:00 horas, los normalistas toman dos unidades de la central de autobuses. Una de éstas avanza por la calle Matamoros cuando comienza a ser perseguida y baleada por varias patrullas de la Policía municipal, por lo que los jóvenes la abandonan a toda prisa.
Los otros tres autobuses también son interceptados por municipales.
"¡No disparen, no disparen! ¡No tenemos armas!", gritan a los uniformados, quienes no paran el tiroteo. Dos jóvenes quedan heridos...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba