'Yo no estoy buscando aplausos ni simpatías'

AutorMaría de la Luz González y Abel Barajas

El tiempo transcurrido y la falta de evidencia suficiente para reconstruir los hechos de la "guerra sucia" son los principales obstáculos que enfrentará en sus investigaciones la recién creada Fiscalía Especializada para desapariciones forzadas de los años 70 y 80, reconoció su titular Ignacio Carrillo Prieto.

Por ello, indicó, se ha solicitado la colaboración de diversas instancias nacionales e internacionales, así como la de peritos e investigadores que participaron en la reconstrucción de hechos similares ocurridos en Chile y Argentina durante las dictaduras militares.

En entrevista, Carrillo comentó que en los 22 días que lleva en el cargo, sólo se han acercado a la oficina los familiares del desaparecido Cruz Hernández, del Estado de México, y la Unión de Madres con Hijos Desaparecidos de Sinaloa, con la intención de ratificar las denuncias que, en su momento, presentaron ante las autoridades.

El funcionario de la PGR advirtió que no sólo investigará los crímenes y delitos presuntamente cometidos por las corporaciones del Estado, sino también aquéllos en los que incurrieron miembros de grupos armados y activistas políticos de la década de los 70 y principios de los 80.

Afirmó que no descarta ningún escenario, incluido el de la división de la sociedad mexicana ante el resultado de las indagatorias, como sucedió en Sudamérica, pero expresó su confianza en que, con base en la ley, se pueda resolver de una vez por todas "este diferendo, esta herida no cicatrizada para poder mirar hacia adelante".

Detrás de un escritorio atiborrado con notas temáticas y periódicos, Carrillo marcó su distancia del grupo político que encabeza el ex Procurador Jorge Carpizo, con quien se le relaciona desde que se integró a la Junta de Gobierno de la UNAM, en 1989.

"Nunca trabajé con Carpizo ni con (Diego) Valdés en procuración de justicia, pero sí en la UNAM. No sé si sea un timbre, un baldón o una vergüenza haber trabajado con Carpizo y con Valadés, me parece que decir eso es una injusticia muy grande, pero yo no trabajé con ellos porque teníamos visiones diversas en procuración de justicia".

Para la investigación de los 532 casos que le remitió la Comisión Nacional de Derechos Humanos, y dos más que le envió la PGR, cuenta con un personal de 60 empleados, de los cuales 20 son agentes del Ministerio Público, uno es perito y el resto son abogados, aunque aclaró que esa plantilla puede crecer o disminuir conforme lo requieran las indagatorias.

Expectativas y...

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