Naturalízate en la Patagonia
| Autor | Jesús Pacheco |
Enviado
RÍO NEGRO, Argentina.- De Puerto Pañuelo sale el catamarán que te llevará en excursión por el lago Nahuel Huapi hasta la Isla Victoria y los arrayanes.
"Cau-cau" lleva por nombre la embarcación, término que en lengua mapuche significa "gaviota grande" y que busca transmitirte la posibilidad de poder volar sobre las aguas del lago y detenerse sobre ellas sin perturbar el escenario.
Entre tus compañeros de viaje hay españoles, italianos y muchos argentinos, pues Bariloche es uno de sus sitios favoritos para vacacionar.
Aunque tenías dos opciones de paseo, seguro escogiste la de día completo, para visitar tanto Isla Victoria como el bosque de arrayanes.
Navegarás alrededor de una hora antes de desembarcar en Isla Victoria, lapso en el que disfrutarás del azul del lago, el verdor de las costas y el blanco de los picos de las montañas.
De pronto, tu meditación sobre las formas que tiene la naturaleza de vanagloriarse y expresar superioridad se verán interrumpidas por la visita de alguna gaviota; se aproximará a la popa del "Cau-cau" a pedir galletas. En la pequeña confitería de la embarcación puedes comprar algunas.
Con facilidad conseguirás una buena foto de tu compañero de viaje dando de comer a las gaviotas. Un tip: dale galleta a las gaviotas blancas, ellas son las maduras y las que se atreverán a volar contra el viento para obtener su premio. Las demás sólo irán en procesión detrás del catamarán.
Ya en la isla, te darán la opción de recorrer el vivero de coníferas en compañía de una guía o seguir tu propio camino, aunque siempre por los senderos señalizados por colores, para no terminar formando parte de la población de la isla.
Si el paseo guiado fue tu elección te enterarás de que este lugar fue habitado hace cientos de años por aborígenes que dejaron evidencias de su paso; podrás comprobarlo si hay tiempo para una escapada a las cuevas.
Caminarás también por la sombra omnipresente de los bosques de pinos, coihues, abedules, secuoyas, eucaliptos, robles, cipreses y más pinos, una gran cantidad de pinos, plantados ahí hace décadas para usar su madera, pero el nombramiento de la zona como Parque Nacional los salvó de ser talados, por eso hay tantos.
Te explicarán que ese entorno sirve de hogar a cormoranes, ciervos, faisanes, pájaros carpinteros y colibríes.
Después de unos 45 minutos de caminata por el único sector accesible al turismo de los tres que conforman la isla llegará la hora de volver al Cau-cau para recorrer otro...
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