El narco: Un problema de dos

AutorJorge A. Meléndez, Luis A. Soto y Victoria Treviño

El combate al crimen organizado es más que nunca un problema de dos: Estados Unidos y México están en el mismo barco al tratar de frenar los estragos que los cárteles de la droga dejan en ambos lados de la frontera.

Así lo reconocen Carlos Pascual, Embajador estadounidense en México; Gil Kerlikowske, director de la Oficina de Combate a las Drogas de EU, y Alan Bersin, el Zar de la Frontera del vecino país del norte.

Jorge A. Meléndez

"Por primera vez en la historia de nuestra frontera, se tiene la voluntad bilateral de desarrollar un enfoque verdaderamente compartido respecto al problema de lo que origina el crimen organizado en México y contribuye a las problemáticas de tráfico que afectan a Estados Unidos. Se trata de un nuevo periodo de comprensión".

Las palabras de Alan Bersin, el Zar de la Frontera de Estados Unidos reflejan la visión que comparten tres de los funcionarios clave en las relaciones entre México y su vecino del norte.

Carlos Pascual, embajador estadounidense en México, y Gil Kerilowske, director de la Oficina de Combate a las Drogas de Estados Unidos, coinciden en que el problema del combate al crimen organizados es de dos naciones unidas por mucho más que una frontera.

"Creo que es importante para México y Estados Unidos que estamos comprometidos a desarrollar capacidades en ambos países, porque hay cosas que mejorar en Estados Unidos: Tenemos que mejorar, pero México también", comentó Pascual.

"El pueblo de México tiene razón: Podríamos estar haciendo mucho más. Pero puedo decirle esto: estamos desarrollando la estrategia antidrogas del Presidente Obama, que saldrá en forma de ley después del primero de enero", admitió Kerlikowske, quién apenas tiene cuatro meses en el cargo.

Esta visión de que la tarea es de ambas naciones ya ha generado avenidas específicas de cooperación.

"Por primera vez implementamos una revisión sistemática del tráfico yendo hacia el sur, a México. La Secretaria de Seguridad Interior, Janet Napolitano, ordenó a las encargados de aduanas y protección fronteriza que emprendieran revisiones sistemáticas desde Brownsville hasta San Diego. Y ello ha tenido un impacto tanto en materia de armas incautadas como en crear una importante disuasión respecto a los millones de dólares procedentes de las transacciones de drogas", explica Bersin.

"Ha habido muchos éxitos en tecnología, capacitación y equipo con la SSP. Por ejemplo, sé que una buena cantidad de funcionarios mexicanos irán a Denver para la Conferencia de Jefes de Policía. Esto es de gran utilidad", explica Kerlikowske.

De acuerdo a los funcionarios, un nuevo elemento importante es que ambos gobiernos han establecido una comprensión común del problema: El flujo de las drogas procedentes del sur y el dinero y las armas procedentes del norte.

"¿Podemos hacer más? La respuesta es siempre sí, siempre hay que intentar hacer más porque estos asuntos son muy graves. Pero si la pregunta es si en Estados Unidos tomamos esto en serio, la respuesta es ¡absolutamente! Estamos comprometidos en todos los niveles", concluyó Pascual.

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