Nacieron ellas para cantar

AutorErika P. Bucio

Desde la canción popular

Erika P. Bucio

Primero fue cantante de música popular y se presentaba en su natal Veracruz. Una experiencia que le ha servido como intérprete una vez que se decidió por la ópera.

Hay que tocar muchas puertas que no siempre se abren. Y no siempre es bien remunerado, comparado con lo que invierte un cantante en su preparación.

Requiere sacrificar fechas importantes, familia y relaciones estables, pero intenta mantener en la cabeza que cada día es una nueva oportunidad.

"Es un trabajo mental fuerte y, sobretodo, esta carrera es de resistencia".

Ha ofrecido galas y conciertos en escenarios como la Sala Neza, la sala principal del Palacio de Bellas Artes y hasta una vez se atrevió con el jazz. Ha seguido preparándose en Tel Aviv Opera House.

Le enorgullece ser una de las 12 voces seleccionadas para el Estudio de Ópera de Bellas Artes. Son, dice, un parteaguas.

En su horizonte está la Mimí, de La Bohéme.

"Es un rol que jamás me aburre y que cada vez que lo escucho o lo leo, descubro nuevas cosas.

María Fernanda Castillo

Soprano. (Veracruz, 1989)

"Mi sueño máximo es ser la Mimí por excelencia".

Con todos los atributos

Erika P. Bucio

Tras escucharla audicionar para el Estudio de Ópera de Bellas Artes, el tenor Ramón Vargas sentenció: "Elisa, eres una artista".

Sobre el escenario, la soprano se siente plena.

Empezó a cantar a la par que aprendía a hablar. Su padre es un barítono aficionado. Es...

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