Los museos que nadie visita
| Autor | Abraham Vázquez |
Durante los años 90, Monterrey fue atacado por una fiebre de museos que aumentó la temperatura de la actividad cultural en la localidad.
De contar con apenas tres espacios importantes como el veterano Museo del Obispado, el Planetario Alfa o el extinto Museo de Monterrey, en la década pasada más de 10 nuevos espacios se abrieron en el área metropolitana.
Algunos se convirtieron en protagonistas del clima cultural actual como Marco o el Museo de Historia Mexicana, otros ahora luchan por su supervivencia.
Tras aquel primer candor febril, cinco espacios inaugurados en plena "museitis" apenas sobreviven padeciendo falta de públicos, escasos recursos y hasta el olvido.
Otros desaparecieron sin dejar rastro.
Semáforo en ámbar
Aunque es un espacio único para viajar por la historia del automóvil, en cuanto a visitas, el Museo de Autos y Transporte Humberto Lobo A.C. poco a poco ha ido agotando su gasolina.
Ubicado en el interior del Parque Niños Héroes, el espacio fundado el 13 de julio de 1990 cuenta con piezas poco convencionales como un auto de vapor Holsman de 1902, un Ford Modelo T que data de 1927, y hasta los autos de los años 60.
Sin embargo, es poco el público que asiste al espacio; alrededor de 2 mil 500 personas, reconoció Juan Manuel Escareño, administrador general del museo.
"Es poco (el público que nos visita), creo que necesitamos más promoción. Hay gente que no sabe que existe este museo", dijo.
El espacio cuenta con 60 vehículos. Es operado por una asociación civil y las mayoría de las piezas y el edificio están en comodato.
Réquiem a la ciencia
Ubicado dentro de las instalaciones del Parque Niños Héroes, el Museo Casa de la Tecnología actualmente luce abandonado y vacío.
Odón Álvarez, coordinador del parque, indicó que esta casa de la tecnología dejó de funcionar desde el 2003.
Su historia dice que nació el 8 de diciembre de 1989 y buscaba impulsar el saber científico y tecnológico.
Contaba con un acervo que constaba de 13 prototipos didácticos y 18 máquinas repetidoras, en las que se mostraban temas como la cultura del agua e introducción a la informática, y era administrado por la Dirección General de Educación Tecnológica Industrial.
Una selva en Monterrey
Aunque es el único museo de fauna en el Norte del País y tiene más de una década de existir, el Museo de la Fauna y Ciencias Naturales apenas es conocido entre los regiomontanos.
"La mayoría de las expresiones (de la gente que nos visita) son de: no sabíamos que teníamos...
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